El hospital maternal y pediátrico de Al Shanan, en la provincia septentrional siria de Idleb, quedó fuera de servicio tras ser bombardeado por aviones en un ataque que causó dos heridos. El médico Osama Abu Ez dijo a Efe por teléfono que hubo tres bombardeos contra el centro de Al Shanan, que ocasionaron daños materiales y heridas a dos trabajadores sanitarios.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirmó el ataque contra el hospital y apuntó que el bombardeo ocasionó la suspensión de las operaciones del centro.

Idleb está controlado por grupos rebeldes y yihadistas y es objeto de los ataques del Ejército sirio y sus aliados.

Por otro lado, las Fuerzas Sirias Democráticas (FSD) continuaron con su avance sobre la ciudad de Tabqa, en manos del Estado Islámico (ISIS). Tabqa está cercada por las FSD que están penetrando en la ciudad desde el sur y el este. Es el último enclave estratégico en su ofensiva hacia Raqa, «capital» del ISIS en Siria. En otro frente, efectivos gubernamentales libraban en la provincia central de Hama intensos combates con grupos yihadistas, entre las que figura el Organismo de Liberación del Levante, la alianza de la filial de Al Qaeda.

Por otra parte, ayer comenzó la evacuación de milicianos rebeldes y sus familias del barrio de Al Waer, en la ciudad de Homs, según los acuerdos de intercambio alcanzados entre el Gobierno y las milicias insurgentes. Al Waer es un enclave controlado por los rebeldes dentro de Homs, controlada por el Ejército. Más de 400 milicianos partirán con sus familias hacia la provincia de Alepo en un traslado que prevé concluir finales de este mismo mes.