Escabechina de Spilak en Sölden
Es esloveno aspira a repetir su triunfo de 2015 tras ganar y vestirse de amarillo sobre un precioso glaciar.

Simon Spilak es el nuevo líder del Tour de Suiza después de vencer y convencer en la meta de Sölden. El esloveno de Katusha, que ya se llevó esta carrera en 2015, dejaba la prueba prácticamente sentenciada, después de rubricar la escabechina montada por su compañero de equipo Taramae y dejar en la cuneta al líder de la prueba hasta ayer, Domenico Pozzovivo, y al resto de rivales, que uno por uno se fueron atragantando en las durísimas rampas del Tiefenbachferner, para legar a un precioso glaciar desde una meta situada a 2.780 metros de altitud.
Merece mención espacial Ion Izagirre. El de Ormaiztegi tuvo que descolgarse del grupo de elegidos a diez kilómetros de meta, y tras varios momentos de crisis en los que debió ralentizar su marcha para tomar aliento, acabó en segunda plaza, siendo el único capaz de limarle tiempo a Spilak en los kilómetros finales. El de Ormaiztegi ascendía hasta la octava plaza de la general, por detrás de Mikel Nieve, primer vasco de la general, y con Pello Bilbao en décima plaza y De la Parte undécimo.
Hubo dos carreras en una. En los 145 kilómetros «de inicio», una nutrida fuga, compuesta por Sagan y Burghardt (Bora), De la Cruz y Trentin (Quick-Step), Restrepo y Planckaert (Katusha), Matthews (Sunweb), Wellens (Lotto Soudal), Oliveira (Movistar), Dibben (Sky), Grmay (Bahrain), Hayman (Orica), Morton (Dimension Data), Nordhaug y Pearson (Aqua Blue), Calmejane y Chavanel (Direct) y Meijers (Roompot), dispuso de hasta tres minutos. Pero el pelotón no permitió ninguna alegría. Wellens fue el último en caer ante el empuje de un gran grupo que apostaba a lo grande en un puerto temible.
Bahrein y Katusha intuyeron cierta debilidad entre los primeros de la general, y movieron el árbol según el firme se empinó. Y acertaron de lleno. Sin hacer ataques, y con un Taramae encendido, el líder Pozzovivo reventaba a 13 kilómetros de meta, y no fue ni el segundo del «Top 10» en tener que ceder.
El asfalto era fino y agradecido para el pedaleo, pero la cuesta no. A diez kilómetros tuvo que ceder Izagirre, mientras que Dombrowski, Spilak y Caruso se iban hacia delante.
No tardaría Spilak en marcharse solo, mientras que Izagirre, cazando a todos excepto al esloveno, protagonizaba una gran remontada. Más aún, en el larguísimo túnel que precedía a los últimos metros, el de Ormaiztegi afianzaba su segunda plaza y cerca se quedó de echar mano de un Spilak que opta a repetir su triunfo de 2015.
Corea y Eslovenia
En lo que respecta al resto de carreras. el australiano Scott Sunderland ganó al sprint la tercera etapa de la Vuelta a Corea del Sur mientras que el local Kyeongho Min sigue como líder, seguido por el kazajo Yevgeniy Gidich y el colombiano Edwin Ávila. El gasteiztarra Jon Aberasturi es el mejor vasco de la general, decimoquinto, a 1.55 del líder. Hoy se disputa la cuarta etapa, de 156 kilómetros, entre Yeongju y Chungju.
En Eslovenia, el ciclista local Luka Mezgec, del Orica, se imponía en la segunda etapa, y además lidera la general gracias a la bonificaciones. Su equipo se esmeró en echar abajo una fuga de siete hombres y facilitarle el trabajo para que lograra triunfo en los metros finales.
Viviani puede con Barbero en el sprint
Elia Viviani (Sky) fue el ganador de la segunda etapa de la Ruta del Sur. La jornada, entre Sor y Saramon, de 173,8 kilómetros, se resolvió al sprint y Viviani derrotó a Carlos Barbero (Movistar), que acabó segundo. No hubo cambio de líder, y Julien Loubet (Armée) permanece al frente de la general.
La etapa, sin grandes dificultades orográficas, vio pronto la escapada del trío formado por el guipuzcoano Pello Olaberria (Euskadi), el francés David Menut (HP BTP-Auber 93) y el australiano Miles Scotson (BMC Racing Team). Ninguno de los tres representaba gran peligro en la clasificación para Julien Loubert, pues de ellos el más cercano era el ciclista de Mutiloa, a 16.36.
Los tres llegaron a contar con una máxima diferencia de 6.50 sobre un pelotón que jugó con los escapados. A falta de 18 kilómetros fueron absorbidos Olaberria y Menur, quedándose solo Scotson. El ciclista oceánico lo dio todo, pero el pelotón lo absorvió a dos kilómetros de meta, donde se impuso Viviani.
La tercera etapa, entre Saint-Gaudens y Gavarnie-Gédre, de 167 kilómetros.GARA

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