Rigoberto Urán, el renacido
El colombiano logró su primera victoria y se colocó cuarto en la general en su regreso al Tour tras cinco años centrado en el Giro.

Rigoberto Urán (Cannondale) dio la sorpresa ayer en Chambery en la etapa más dura del Tour al imponerse en el sprint del sexteto completado por Barguil, el mejor de la escapada, y los más fuertes de los favoritos Froome, Bardet, Aru y Fuglsang.
El colombiano había decidido cambiar este año de calendario tras cinco años en los que se centró en el Giro –en el que ha ganado dos etapas y fue segundo en 2013 y 2014–. No conocía la victoria desde que llegó el año pasado al Cannondale y parecía que ya no estaba en disposición de disputar las generales, pero apostó por el Tour y ayer fue el más fuerte porque no solo ganó. Lo tuvo que hacer sin poder cambiar el piñón (sprintó con un 53x11) porque Dan Martin le inutilizó el cambio en su caída. Pese a ese problema fue capaz de responder a los ataques de Froome y Fuglsang en el último kilómetro y superó a Barguil por centímetros.
Nairo Quintana y Dan Martin llegaron a 1:15 en un grupo con Mikel Landa, octavo en la etapa y noveno en la general. Mikel Nieve, a pesar del trabajo realizado, entró decimotercero y es decimocuarto en la general. Contador llegó a 4:19 y Porte y Thomas quedaron fuera de carrera por sufrir dos duras caídas en los descensos de los dos últimos puertos. El galés se rompió la clavícula y el líder del BMC se salió de la carretera en el descenso del Mont du Chat y sufrió un fuerte traumatismo craneal y en la pelvis y en su brutal caída derribó a Dan Martin.
Los cinco favoritos que llegaron adelante, Porte y el irlandés superaron juntos el último puerto, donde hubo muchos ataques y ninguno fue superior a los demás. Coronaron a pocos segundos de Barguil y en el descenso atacó Bardet, que alcanzó medio minuto de ventaja, pero sus rivales se pusieron de acuerdo y consiguieron atraparlo a falta de dos kilómetros.
En el sprint Urán superó a Barguil, que celebró la victoria por equivocación y luego se tuvo que conformar con la montaña y la combatividad.
Sunweb y Barguil lo merecían
También mereció la victoria porque el bretón y su equipo Sunweb fueron los que más trabajaron para conseguirla. La jornada comenzaba con un puerto de Segunda y de salida se formó una fuga de 40 corredores en la que el equipo de Barguil, con cinco, fue el más representado. Betancur era el mejor en la general, pero sin inquietar al Sky, que permitió a la fuga llegar a tener siete minutos.
En el descenso del primero de los tres puertos de categoría especial Ag2r, que tenía tres corredores por delante, intentó sorprender con Bardet y eso provocó un nerviosismo y caídas como la de Geraint Thomas, que abandonó con fractura de clavícula. También tuvieron que retirarse tras caerse Mori y Gesink y Jesús Herrada y Majka no llegaron a subirse al coche, pero les faltó poco. También Contador se cayó en el mismo descenso, pero pudo enlazar rápido.
El desgaste al que sometieron Ag2r y Sky al pelotón provocó que en la segunda subida especial de le Grand Colombier se quedara un grupo muy selecto en el que no hubo más movimientos hasta la última ascensión al durísimo Mont de Chat, a cuyo inicio llegaron solo 18 ciclistas a dos minutos de los escapados Bakelants y Gallopin.
Sky llegó con Henao, Landa, Nieve y Froome al inicio del último puerto en el que tuvo un problema mecánico que aprovechó Aru para atacar, pero nadie quiso relevarle, ni su compañero Fuglsang, y el líder agradeció a Porte por pedir que se le esperara. Froome empujó con el hombro a Aru contra el público al volver al grupo de elegidos, aunque luego se disculpó. El sardo declaró que no sabía que sufrió un problema mecánico.
Con el ritmo de Nieve se quedaron una docena de corredores y entonces empezaron los ataques que dejaron a siete en cabeza, aunque solo cinco pudieron llegar juntos a meta tras una etapa que resultó durísima.
FDJ perdió medio equipo
FDJ salió decidido a disputar la etapa y la montaña con Thibaut Pinot, pero tras pasar en cabeza los dos primeros puertos se vio que no estaba en condición de pelear con los mejores de la escapada en los de categoría especial. Pero además perdió a cuatro corredores en una decisión poco comprensible porque Arnaud Démare demostró en la etapa anterior que no estaba en condiciones de seguir en la carrera en una jornada tan dura como la de ayer. Se quedó de salida y Marc Madiot decidió que le acompañaran Mickaël Delage, Ignatas Konovalovas y Jacopo Guarnieri y los cuatro llegaron fuera de control junto a Renshaw, Jura Sagan, Van Endem y Trentin. Los corredores agradecerán la jornada de descanso hoy antes de las dos etapas de aproximación a los Pirineos.
Froome, menos superior que nunca
Chris Froome es el más fuerte hasta el momento, mantuvo el liderato y aumentó en cuatro segundos su ventaja sobre los rivales por la bonificación del tercer puesto, pero nunca se había visto en el Tour que seis corredores respondieran a una aceleración suya como sucedió en los últimos kilómetros del Mont du Chat. No ha conseguido distanciar en ninguna etapa en línea a los más fuertes, toda la ventaja que tiene es la lograda en la crono de Düsseldorf y Aru y Urán han recortado diferencias con sus victorias en La Planche des Belles Filles y ayer en Chambery.
Además Sky sufrió ayer una baja importante por la caída de Thomas, pero Porte también se quedó fuera de carrera y con él desapareció el que parecía uno de los mayores rivales y la caída de Martin también le alejó en la general. Ahora solo quedan tres corredores por debajo del minuto –Aru, Bardet y Urán–, aunque en un margen de dos minutos hay otros cuatro más, lo que da más emoción.J.I.

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