Natxo MATXIN
OSASUNA

Xisco se convierte en el «killer» favorito de la hinchada

Dos partidos le han bastado a Xisco para convertirse en ese tipo de killer que levanta pasiones por estos lares. Fichado como último complemento para la delantera –antes llegaron David Rodríguez y Quique– y con las dudas por su paso por el fútbol asiático, el ariete mallorquín ha despejado todas las incógnitas sobre su puntería en menos de una semana.

La potente presencia que exhibe sobre el campo, tanto en lo que se refiere a envergadura como despliegue físico, sumado al salvador gol in extremis anotado en Copa y las dianas postreras en Vallecas, invitan a pensar que la grada rojilla ya dispone de un nuevo ídolo al que aclamar. No suele ser muy habitual que futbolistas recién llegados dispongan de tan poco tiempo para aclimatarse y ya comiencen a ofercer un rendimiento tan óptimo, aunque existen precedentes parecidos.

El que más se acerca en el tiempo es el de Savo Milosevic, quien en la temporada en la que aterrizó en la escuadra rojilla –2004-2005– ya dejó a las primeras de cambio buena muestra de lo que era capaz cuando encaraba al portero rival. En apenas cinco jornadas, el atacante serbio había anotado nada menos que otras tantas dianas al Athletic, Deporti- vo –por partida doble–, Betis y Getafe. Curiosamente, esas magníficas sensaciones no se vieron corroboradas en el resto de la campaña, ya que solo anotó un gol más, en la jornada 35º.

Además del balcánico, también otros jugadores en la historia osasunista han tenido inicios fulgurantes de cara al marco contrario. Dos nueves míticos en los anales rojillos, Sabino e Irigibel, también llegaron a anotar cuatro y cinco tantos en los primeros cinco partidos de competición, lo mismo que otros delanteros, caso de Ríos, Hormaetxe, Silvestre y Areta III. Sin embargo, la palma se la lleva otro histórico, Félix Ruiz, que materializó siete goles en la 1960-61, aunque dentro de una categoría muy diferente, en cuanto nivel, a la actual.

Dos sesiones sin público

Después de entrenar ayer en Las Rozas y disponer hoy de jornada de descanso, la plantilla retomará el trabajo mañana en Tajonar, en la única sesión abierta de la semana. Posteriormente, tanto el jueves –Tajonar– como el viernes –El Sadar–, los entrenamientos serán sin la presencia de público y medios.