Desde que se conoció que «Ugarteko» había demandado a la abogada de la familia Cabacas, Jone Goirizelaia, a NAIZ, a GARA, a su director y a uno de sus periodistas, exigiendo primero 777.000 euros y finalmente 250.000 por daños a su promoción profesional y su salud, a este diario han llegado testimonios del malestar que el movimiento del suboficial de la Ertzaintza ha generado entre responsables de la Consejería. Sin embargo, preguntados ayer por su posición pública, la respuesta oficial fue que «como Departamento no hacemos valoraciones sobre acciones jurídicas que, a título particular, emprenden funcionarios del Departamento de Seguridad».

Se trata de una contestación en sintonía con la que la consejera Estefanía Beltrán de Heredia remitió al Parlamento en marzo de 2016.

En aquella misma respuesta parlamentaria, el Departamento de Seguridad aseguraba que no participaba de ninguna manera en esta demanda judicial de «Ugarteko», ni le había ofrecido defensa jurídica con letrados de la Consejería, ni le sufragaba la contratación del abogado. Fuentes gubernamentales insistieron ayer en ello en respuesta directa a este diario.

Por otra parte, según informaciones a las que ha tenido acceso GARA durante el proceso judicial al que se enfrenta por la demanda del suboficial 3316, ha quedado en evidencia la desafección de los responsables de la Consejería hacia la actuación de «Ugarteko» en esta causa concreta.

Caben recordar los esfuerzos realizados con anterioridad para mantener fuera del juicio por la muerte de Iñigo Cabacas a este mando que ordenó «entrar con todo» en el callejón donde el hincha del Athletic recibió un pelotazo de la Ertzaintza en la cabeza.

Juicio, mañana a las 9.30

El juicio por la demanda interpuesta por «Ugarteko» se celebrará mañana, a las 9.30, en la sala de vista número 13 de los juzgados de Bilbo. El suboficial 3316 asegura que las declaraciones públicas de la abogada Jone Goirizelaia y las informaciones de GARA y de NAIZ son «el detonante de su deterioro de salud y del cercenamiento de su carrera profesional».

El demandante acusa a GARA y NAIZ de haber manipulado las grabaciones de las conversaciones por radio entre «Ugarteko» y las dotaciones de la Ertzaintza desplegadas aquella noche en el lugar donde Iñigo Cabacas recibió el pelotazo mortal. La detallada infografía publicada por este diario con el minutaje de las grabaciones desmiente esa acusación.

Otro motivo de querella es haber desvelado la identidad del suboficial 3316, que en realidad la había publicado en su día el Boletín Oficial del País Vasco.

Por otra parte, al ser trasladado de puesto «Ugarteko» mantuvo su categoría y salario anterior como oficial en comisión de servicios.

 

EH Bildu pide aclarar la muerte y no perseguir a quien investiga

EH Bildu sostuvo ayer que «es hora de esclarecer de una vez la muerte de Iñigo Cabacas y no de perseguir a quienes trabajan con ese objetivo». A través de un comunicado, la formación transmitió su solidaridad a GARA y NAIZ, a sus periodistas y a Jone Goirizelaia, abogada de la familia. Denuncia que «van a ser juzgados por hacer su trabajo, por cumplir la función social que los medios, por un lado, y las abogadas y abogados, por otro, tienen encomendada en cualquier democraci»a.

En el escrito, EH Bildu critica que el primer juicio por el caso vaya a ser este y no el que dirima las responsabilidades de la muerte, lo que en su opinión «deja en muy mal lugar al sistema judicial». También considera que «la Justicia no actúa igual con los demás medios de comunicación».

La formación manifiesta que el juicio que se celebrará mañana, «además de acentuar el dolor de la familia Cabacas, es un ataque directo a la libertad de prensa y al derecho de la ciudadanía a recibir información veraz. Asimismo –recalca–, choca con cualquier criterio lógico que siente en el banquillo a la abogada de la familia por hacer su trabajo, que no es otro que ejercer la acusación, si lo considera, también contra ‘Ugarteko’». EH Bildu concluye que «es un despropósito, el mundo al revés, que un acusado siente en el banquillo a una abogada por ejercer eficazmente la acusación».GARA