A. G.
NBA

Derrick Rose recuerda al MVP de 2011 tras lograr 50 puntos ante los Jazz

Felicitado por todo su equipo, aclamado por la grada de los Timberwolves, después de anotar 50 puntos con el corolario de añadir el tapón que certificó el triunfo de Minnesota sobre Utah por 128-125, Derrick Rose tenía motivos para estar emocionado, al borde de las lágrimas.

Su tope anotador desde que llegara a la NBA era de 42 puntos, conseguido el año 2011, cuando obtuvo el galardón de MVP de la temporada. Luego vendrían el calvario con las lesiones de rodilla, los cambios y más cambios a distintas franquicias, el recuerdo de un gran jugador que se quedó a medias. Hasta que llegó este partido en el que faltaba Jimmy Butler, el principal referente de los Timberwolves, y saltó Derrick Rose recordando a su mejor versión a sacar las castañas del fuego.

«No hay palabras que puedan describir cómo me siento ahora mismo. Ha pasado demasiado tiempo», reconoció Rose. Es posible que el hechizo se rompiera con el bocinazo final del partido, pero el MVP 2011 regresó por una vez al parqué, olvidando los malos momentos de entre medias.

LeBron puede un poco más

Un tiro libre encestado por LeBron James a falta de dos segundos supuso la agónica victoria de los Lakers sobre unos Dallas Mavericks que, aún sin Nowitzki, estuvieron muy cerca de dar la campanada en el Staples Center.

No tanto por los 14 puntos de Doncic, sino porque el esloveno fue uno de los que «arrearon» a los texanos pasando de caer por 110-96 a empatar a 113 a falta de siete segundos, con una canasta obra del propio Doncic. Pero el mago de Akron tuvo la última palabra.