La Real no ha logrado un gol en los tres últimos partidos jugados en Anoeta y en cuatro de las cinco últimas jornadas de Liga a pesar de tener a cinco goleadores en su plantilla como Willian José, Oyarzabal, Sandro, Juanmi y Bautista que, sin contar los penaltis, solo han marcado en una de las diez últimas jornadas.

Bautista y Willian José marcaron los dos goles en el empate contra el Rayo Vallecano del 25 de setiembre. Desde ese partido la Real solo ha visto puerta en el derbi de San Mamés con dos tantos de penalti de Mikel Oyarzabal y uno de Luca Sangalli.

Además el brasileño y Juanmi consiguieron los dos goles en la primera jornada en Villarreal. Al margen de esos tres partidos, los jugadores en los que recae la mayor responsabilidad goleadora del equipo solo han aportado el tanto de Willian José al transformar el penalti de Ipurua en el que cayó lesionado.

Asier Garitano destacó tras el partido contra el Sevilla los problemas que han tenido los delanteros para mostrar su esperanza de que con continuidad el equipo mejorará en el futuro. Willian José se lesionó en la tercera jornada, pero ha jugado ocho partidos, como Juanmi porque solo se ha perdido los tres por sanción. Oyarzabal solo causó baja en el partido del Metropolitano, Bautista ha estado disponible siempre y Sandro en los últimos cinco partidos tras superar su lesión muscular.

Januzaj, el mejor

La falta de gol de la Real no hay que buscarla en los problemas y la inactividad de los delanteros. Con más bajas en San Mamés es cuando más goles ha marcado y el único que puede tener esa excusa es Januzaj porque solo había jugado diez minutos en Liga y en Vigo en los últimos cinco meses y fue el que más frescura ofreció el domingo y el mejor de los jugadores ofensivos.

El problema en ataque no está ahí, sino en que la Real no genera ocasiones suficientes para que los delanteros goleadores demuestren sus virtudes. Al margen de que asume menos riesgos y juega más cerrada que con Eusebio, algo que era necesario, está demasiado preocupada en anular las virtudes del rival en lugar de intentar sacar partido de las propias. Eso implica que el equipo defiende mejor y concede menos ocasiones –solo ha recibido un gol en los tres últimos partidos de Anoeta en los que no ha marcado–. pero con eso no basta para ganar y es contraproducente en ataque. Además los cambios para contrarrestar la forma de jugar de los rivales son constantes en posiciones y sistemas de juego y así es difícil generar automatismos que permitan atacar con más velocidad para buscar desequilibrios. Los técnicos no han fichado el extremo rápido que buscaron, prefirieron incorporar a Sandro, y si no hay velocidad hay que buscarla con una circulación más rápida del balón para encontrar espacios en las defensas rivales. Si hay cambios en posiciones y en sistemas es difícil alcanzar esa velocidad.

Por eso el desequilibrio ante el Sevilla se redujo a lo que se sacó de la chistera Januzaj, pero casi todas sus jugadas las acabó con disparos en mala posición. Solo una vez buscó el centro y nadie llegó al remate. Al margen de lo que hizo el de Bruselas apenas se pueden contabilizar el gran pase de Zurutuza a Sandro, dos centros de Aritz que no pudieron rematar bien Juanmi y Willian José y una internada del lateral, que también dio la asistencia a Juanmi que permitió empatar y cambiar la visión del partido de Copa al final.

Que el beasaindarra, el mejor realista en este comienzo de temporada, sea la segunda opción ofensiva del equipo ante el Sevilla no es una buena señal cuando juegan juntos jugadores de la calidad ofensiva de Theo, Illarramendi, Zubeldia, Januzaj, Oyarzabal, Willian José y Juanmi. El once del domingo fue el más ofensivo en cuanto a jugadores de los alineados por Garitano, pero hay que generar juego de ataque y, sobre todo, crear ocasiones para poder sacar partido de la calidad goleadora.

Goles en los últimos años

Porque pocos equipos tienen en su plantilla delanteros que hayan marcado tantos goles. Willian José ha sumado 27 goles en Liga en las dos ultimas temporadas, doce y dos en la Copa en su primera en la Real y quince y cinco en la Europa League en la segunda. Juanmi llegó con él y sumó en las dos primeras temporadas 19 goles en Liga con muchos menos minutos, once y cuatro en la Copa en la primera y ocho, uno en Copa y otro en Europa League en la pasada.

Mikel Oyarzabal marcó seis goles en Primera en la media temporada de su debut en la Real, dos y dos en Copa en la siguiente campaña y doce y dos en Europa League en la pasada.

Sandro marcó trece goles en Liga y dos en Copa con el Málaga en la 2016-17, aunque la pasada solo logró uno en la Europa League en su primera media temporada en el Everton.

Y Jon Bautista ha logrado seis goles en los escasos 1.035 minutos que ha jugado en Primera, un promedio muy bueno para no tener continuidad.

 

Posible sanción por comenzar tarde el partido

El navarro Prieto Iglesias escribió en el acta que «el encuentro comenzó con cuatro minutos de retraso respecto al horario previsto debido a que los actos protocolarios organizados por el club local se demoraron más de lo que se nos había notificado en los vestuarios en la reunión prepartido con los delegados de ambos equipos».

El club blanquiazul preparó unos actos para dar más realce al renovado himno con la entrada de abonados que han cumplido más de 75 años en esa condición que se sentaron en el centro del campo, en el que se juntaron los jugadores de los dos primeros equipos para cantarlo y, pese a que entraron al campo antes que los jugadores y de que éstos salieron antes de lo habitual, todo se prolongó más de diez minutos y eso llevó al árbitro a reflejarlo porque tienen que garantizar que un partido empieza a su hora, y más con los horarios que marca la televisión. Como la Real es responsable lo previsible es que sea sancionada económicamente.

Más allá de la sanción, del debate del cambio de una palabra o del ritmo, no se puede tener a los jugadores parados diez minutos antes de empezar un partido tras un calentamiento o con el pensamiento puesto en dónde tienen que situarse para cantar un himno que solo cuatro de los once titulares han mamado en lugar de pensar qué deben hacer para ganar el partido.J.I.