Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - KIROLBET BASKONIA

Pitos, pruebas, triples y aplausos de despedida

Perasovic debutó labrando su triunfo en el segundo cuarto. Brillaron Shengelia, Hilliard, Janning y Vildoza.

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Hubo de todo en el Buesa Arena, aunque el resultado final fue de un aprobado alto. Hubo silbidos en la presentación del Baskonia, empezando al propio Velimir Perasovic, pitos que se convirtieron en aplausos al final del partido tras la convincente victoria ante un Gran Canaria tristón. ¡Hubo triples!, nada menos que 10 de 22, con Vildoza, Hilliard y Janning sumando con una facilidad inaudita hasta la fecha. Hubo pruebas, muchas combinaciones, lógicas por parte del nuevo entrenador, y sobre todo, hubo un happy end que el club y la afición necesitaban.

Sorprendió Perasovic en su primer quinteto, al meter a Garino y Vildoza en lugar de Shields y Huertas, con Hilliard por delante de Janning. Fue el base argentino quien, de tres, estrenó el marcador gasteiztarra. Hilliard se subió al tren del base argentino enseguida y Janning, que entró desde el banquillo, tampoco tardaría. Gran Canaria solo aguantó el primer envite, porque a la segunda se vino abajo. En cuanto los gasteiztarras cortaron la sangría reboteadora, endosaron un parcial de 29-13 que rompía el partido, llegándose al descanso con un 51-36 a la postre ilevantable.

La renta local llegó a los 21 puntos, con buenos minutos de toda la batería interior, incluido un Voigtmann mejorado y que no solo jugó de ala-pívot. Sin Granger, aún lesionado, Perasovic probó al resto de sus jugadores y estos, salvo Shields, no respondieron mal. Así lograron pasar de los pitos a los aplausos.

«Había en mí una deuda hacia el club y la ciudad»

Sorprendió Velimir Perasovic al afirmar que «dentro de mí había una deuda hacia el club y la ciudad; hay otros sentimientos de gente a la que sin querer he dañado». El ogro también tiene su corazoncito.

Sobre el partido, declaró que «por las circunstancias de esta semana, ha sido complicado. El equipo entró un poco tenso, pero a partir del segundo tiempo marcamos las diferencias. Desde entonces, hemos dominado hasta el final», resumió el preparador croata.

El de Split reconoció que tiene un plantel «muy bien trabajado» y opinó que el principal problema «es más anímico que otra cosa». Eso sí, subrayó que «hay que empezar a ganar». Así, calificó de «finales» los próximos partidos de Euroliga, aunque al mismo tiempo dijo que «la Euroliga quema mucho, pero si el equipo entra en una dinámica de tres o cuatro victorias volverá a acercarse a los puestos de play off». A. G.