En los memorables años 80 de la NBA, Los Angeles Lakers y Boston Celtics vivieron épicas batallas en las que no siempre venció el mismo. Pero con el paso de los años y las lesiones, se fueron encontrando con un tercer rival que acabó hundiendo a los dos: unos Detroit Pistons que, a su vez, ejercieron de muro de contención de los pujantes Chicago Bulls. Algo así puede haberse sentido en el seno de los Toronto Raptors, ya que con su triunfo por 110-114 en el sexto duelo de la Final de la NBA no solo logró el primer anillo de su historia, ganando 4-2 en total, sino que pudo haber acabado con la dinastía de los Warriors.

Y es que la Dub Nation, tan beneficiada en el pasado por las lesiones de Kyrie Irving o Kevin Love, de los Cavs, en varias Finales, o la lesión de Chris Paul el año pasado cuando los Rockets ganaban por 2-3 las Finales del Oeste, han tenido la negra en su cruce con Toronto. Primero fue Kevin Durant, que forzó su regreso para terminar con el tendón de Aquiles roto. En el sexto partido la víctima fue Klay Thompson. Cuando llevaba 30 puntos –con solo 12 tiros de campo– se rompió el ligamento anterior cruzado de su rodilla izquierda, y los Raptors esta vez no dejaron pasar su oportunidad de victoria.

Pese a los citados 30 puntos de Thompson, los 22 de Iguodala y el enésimo triple doble de Draymond Green, e incluso pese al buen hacer de un renqueante DeMarcus Cousins, el peso de la eliminatoria fue demasiado para un Stephen Curry que, pese a sumar 21 puntos, no estuvo a su mejor nivel. Erró sus últimos ocho tiros, incluido un triple a ocho segundos del final y con 110-111 en el luminoso.

Los Raptors en cambio, esta vez aguantaron el tipo y no se dejaron obnubilar por el vértigo. Fred VanVleet, autor de 12 puntos en el último cuarto, fue el principal baluarte canadiense en los minutos finales, con un Kyle Lowry menos ofuscado que en el quinto partido sumando 26 puntos, por otros 26 de Pascal Siakam. Por otro lado, el MVP de la Final, Kahwi Leonard, esta vez no brilló, pero tampoco le tembló el pulso para convertir los tiros libres con que los Raptors sellaban su anillo.

Como anécdota, pocos sacarán tanto pecho como en la Federación Española de Baloncesto. No solo por el pasado Raptor del presidente Jorge Garbajosa, sino por el éxito del seleccionador hispano Sergio Scariolo, el hispano-congoleño Serge Ibaka y Marc Gasol. Los Gasol son los primeros hermanos que logran un anillo de la NBA cada uno.

¿Y el año que viene?

Eso sí, preocupa el año que viene de los Warriors. Sin Durant –agente libre– ni Klay Thompson, su traslado a San Francisco puede suponer el inicio una larga reconstrucción de una de las franquicias más inolvidables de la historia de la NBA.

Toch Sarr renueva por otro año con IDK

Por novena temporada, séptima de forma consecutiva, Toch Sarr defenderá los colores de IDK Gipuzkoa, renovación casi cantada que el club donostiarra confirmó ayer.

La ala-pívot senegalesa lleva 217 partidos defendiendo la elástica donostiarra, y a sus 35 años ha completado una campaña 2018/19 fantástica en la que ha promediado 10,6 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias –la pívot que más asistencias ha dado en toda la Liga Femenina–, participando nada menos que 32 minutos por partido.

Sarr se declaraba «contenta» en sus declaraciones en la web de IDK Gipuzkoa, mientras prepara el Campeonato de África que se celebrará entre el 9 y el 18 de agosto. «Me siento muy joven, como si tuviera 16 años. Para mí es un reto hacerlo la próxima temporada mejor incluso que esta», dijo.

En lo que respecta al baloncesto masculino, Dani Pérez no seguirá en Gipuzkoa Basket, pero sí en la Liga ACB. Baxi Manresa hizo público ayer su fichaje para las próximas tres temporadas. A. G.