Arnaitz GORRITI
CAMPEONATO DE BIZKAIA DE TRAINERAS

Urdaibai al fin ondea un trapo

La «Bou Bizkaia» se impuso con claridad en Lekeitio, superando a Santurtzi, Zierbena y Ondarroa. En féminas, Kaiku se llevó el triunfo.

«Ni antes éramos tan malos, ni ahora somos tan buenos. Pero seguimos siendo Urdaibai». Son palabras de Gotzon Aranburu, presidente de Bermeo, después de que los txoa por fin terminaran con su sequía de esta temporada y ondearan el trapo que los acreditaba como Campeones de Bizkai, un galardñon conseguido con todas las de la ley en las siempre exigentes aguas de Leketio.

La «Bou Bizkaia» superó por la mano a Snaturtzi y Zierbena, dos embarcaciones que esta temporada ya saben lo que es ganar una bandera. Los de Bermeo, en todo caso, saltaron al agua llenos de ambición y gracias a esa ambición, pese a las dificultades de la mar fruto del viento, dominaron la regata.

Si el primer largo fue de lo más igualado, con Zierbena y Santurtzi a apenas una trainera de los txos, en adelante Bermeo se impuso y no dio ninguna oportunidad a sus adversarios. Se garantizó un campeonato para el que parece abonado en las últimas temporadas y logró el billete al Campeonato de Euskadi, junto con Santurtzi, segundo al final, Zierbena y una Ondarroa que bogó en la segunda tanda y logró la cuarta posición final, superando con claridad –un margen de 31 segundos, nada menos– a una Kaiku que, al menos en categoría masculina, no estuvo ni cerca de su mejor nivel, aunque quizá ese mejor nivel sea ya cosa de hace unos pocos años.

Triunfo de la «Bizkaitarra»

A diferencia del nivel mostrado por los hombres de Kaiku, las mujeres sí que dieron su mejor cara, problamándose campeonas de Bizkaia. Las de Sestao batieron con 12 segundos de margen a la «Tomatera» de Deustu, en 24 a Ondarroa y en 32 a la de Isuntza, consiguiendo una victoria de muchísimo nivel, en una de las veces que más participación y calidad tuvo el Campeonato Femenino de Bizkaia.

Con el viento encrespando la mar por momentos, las remeras debieron hacer uso de su pericia y en esa situación fue Kaiku quien mejor se supo manejar, logrando ondear el trapo.