Joseba ITURRIA
CICLISMO AMATEUR

La constancia coloca a Xabi Ortuzar entre los mejores

El gernikarra es noveno en el Euskaldun tras comenzar la temporada como independiente y volver a vestir el maillot del Aiarabike. «Verme tantas carreras con la gente que disputa puestos de podio es gratificante».

Xabier Ortuzar (Gernika, 1995) ha pasado de ser un debutante que solo tenía el objetivo de acabar carreras a colarse entre los mejores y ser noveno en el Euskaldun en su segundo año élite, que comenzó como independiente y acabará en el Aiarabike.

Ortuzar atribuye su progresión a «la constancia. Es la clave. Soy bastante constante en todo. Si me propongo algo intento llevarlo hasta el final. Empecé en la Gernikesa. Al principio lo compaginaba con el fútbol, pero en cadetes me decanté por el ciclismo, que es lo que más me llamaba. En cadetes y juveniles no destacaba, pero me gustaba el ciclismo y tenía claro que quería seguir como sub’23. El problema era encontrar un equipo y el Sopela me hizo un hueco. El primer año con acabar carreras ya estaba contento».

Tras ese debut en 2014, el Sopela-Ugeraga decidió quedarse solo con la estructura femenina y tuvo que volver a buscar un equipo que encontró en el Iza Maestre (2015-16): «Buscaba una oportunidad para seguir, que es lo que me daban. No nos presionaban nada para competir».

En 2017 fichó por el Aiarabike y tras dos años «pensaba dejarlo. Luego me animé, pero no quería comprometerme porque si me comprometo es para cumplir y hacer toda la temporada. Como no sabía cómo iba a andar de estudios, decidí empezar como independiente. Al ser élite, tenía dudas de seguir. Me gusta la bici y competir, pero el calendario es reducido. Estaba estudiando Ingeniería Mecánica, que al final de año lo dejé, y como me gusta decidí continuar».

Los resultados han sido muy buenos y por eso se decidió a volver al Aiarabike: «Año a año he ido dando pasitos y con constancia y ganas he llegado hasta donde estoy ahora, que tampoco destaco mucho en el campo aficionado, pero para mí verme con los de adelante y disputar el Top 10 es el premio a tantos años de trabajo y constancia».

Ha destacado en las carreras más duras, como en el séptimo puesto del campeonato de Euskadi, y por eso es noveno del Euskaldun, quinto si se descarta a los que no han llegado al 70% de las pruebas que se piden para aparecer en la clasificación final, lo que atribuye a la regularidad.

«Siempre he sido regular»

«Siempre he sido regular, todos los años, en un nivel u otro. Verme tantas carreras con esta gente que disputa es gratificante. En varias he llegado con el grupo del tercero. Con el sprint que tengo no puedo llegar al podio, pero verme luchando por él ya es mucho. No solo yo, todo el equipo lleva bastantes puestos. No hemos ganado, pero en Bidasoa, Navarra, Lehendakari y Euskaldun tenemos muchos Top 10. Somos regulares y estamos justo por detrás de los equipos que juegan a otro nivel. Estamos contentos», destaca Ortuzar.

También le gusta el ciclocross: «En juveniles hacía toda la temporada y en aficionados casi todos los años hago 4-5 carreras. Me gusta. No voy a disputar, sino a disfrutar, a pasarlo bien. Me gusta el ambiente del ciclocross y me viene bien para preparar la carretera y coger fuerza y explosividad. En este momento, no busco pasar a profesionales, sino disfrutar de las oportunidades que tengo porque al ser élite el calendario es reducido».

Desde ayer corre la Vuelta a Cantabria tras acabar con buenas sensaciones la de Zamora. Ayer no pudo estar con los mejores y llegó a meta el 64º a 8:25 de Kiko Galván, que ganó a su compañero de escapada en los últimos kilómetros, el debutante Josu Etxeberria y con 41 segundos a un grupo en el Onditz Urruzmendi fue sexto y Andoni López de Abetxuko séptimo.

Fiel a Iñigo Urtaran desde el Iza Maestre

La trayectoria amateur de Ortuzar está ligada a la del responsable del Aiarabike, Iñigo Urtaran, con el que seguirá: «Le conocí en el Maestre, me dijo que quería sacar un equipo nuevo más potente con otras ambiciones, me gustó la idea y decidí irme con él. También seguiré el año que viene porque me dijo que me quiere en el equipo, que está muy contento conmigo. Ayudar al equipo fuera en el día a día, no solo dentro del pelotón, no me cuesta nada. Ayudaré en lo que pueda a los jóvenes y aportaré todo lo que sé».

Urtaran destaca que «desde que comenzó el proyecto ha estado con nosotros. Hizo dos años y decidió dejarlo, aunque cambió de opinión, empezó de independiente este año y lo rescatamos a mitad de temporada. Es un lujo de corredor, compañero 10, responsable, entregado, obediente, lo que todo un director desea de un corredor. Ha progresado mucho y este año ha dado el paso que le faltaba hacia adelante y también como persona. Me alegro mucho de haber coincidido con un corredor como él».J.I.