El estonio Ott Tänak (Toyota) necesita sumar dos puntos más que el francés Sébastien Ogier (Citröen) para lograr por primer vez el Mundial de pilotos de rallyes, objetivo que podría alcanzar este fin de semana en la penúltima prueba, el Rallye de Catalunya, que se volverá a disputar en tramos mixtos (tierra y asfalto).

Los aficionados tendrán la oportunidad de asistir a una prueba que el año que viene, a petición propia, dejará de disputarse tras veintinueve ediciones ininterrumpidas, ya que el Rallye de Catalunya entrará en la rotación, junto al de Córcega y el de Australia, para regresar en 2021 y 2022. En su lugar, tres históricos también regresarán, los de Japón, Nueva Zelanda y el Safari en Kenia.

En cuanto al fin de semana, después de quince años de dominio de los pilotos franceses (Sébastian Loeb, nueve títulos; y Sébastien Ogier, seis), un piloto de otra nacionalidad pueda proclamarse campeón en Catalunya, en un prueba que tiene 17 tramos cronometrados (325'56 kilómetros).

Tänak afronta la penúltima prueba antes del final en Australia con 28 puntos de ventaja respecto a Ogier y 42 sobre el belga Thierry Neuville, ya con remotas opciones.