El peronista Alberto Fernández, de 60 años, ganó el domingo en primera vuelta las elecciones presidenciales en Argentina, frente al derechista Mauricio Macri, quien pone fin a su mandato con la peor crisis económica de los últimos 17 años en el país, en un momento en el que una ola de protestas recorre América Latina.

Con el 96,99% de los votos escrutados, Fernández, del Frente de Todos, se impuso con el 48,10% de los sufragios a Macri, que obtuvo un 40,36%, una ventaja mucho menor de la pronosticada por los sondeos. Así, el presidente electo tomará las riendas del poder para el peronismo el 10 de diciembre sin necesidad de una segunda vuelta.

«Los tiempos que vienen no son fáciles (...) lo único que nos preocupa es que los argentinos dejen de sufrir», señaló Fernández, visiblemente emocionado, en relación a la crisis económica que vive el país, al tiempo que convocó a «todos los argentinos» a unirse a su proyecto para enfrentarlos. También le pidió al Gobierno de Macri que sea consciente de lo que deja y ayude a reconstruir el país de «las cenizas que han dejado».

En esa línea, la expresidenta Cristina Kirchner, su compañera de fórmula, solicitó a Macri que en los últimos días de su mandato «tome todas las medidas necesarias para alivianar esta situación dramática».

Bajo un clima de tensión en varios países de América Latina, con masivas protestas en Chile, Bolivia y Ecuador, las elecciones en Argentina, donde el centroizquierda peronista desaloja del poder a la derecha, son clave en la configuración de fuerzas.

Tras conocer su derrota, Macri, que confiaba en forzar una segunda vuelta, felicitó a Fernández y prometió hacer una oposición «sana y constructiva». Ambos se reunieron ayer en la Casa Rosada para dar inicio un «período de transición ordenada, que lleve tranquilidad a todos los argentinos».

Macri pone fin a su mandato con el país sumido en la peor crisis económica desde 2001, con una alta inflación (37,7% hasta setiembre) y un aumento de la pobreza (35,4%). Defendió, sin embargo, que debió hacer ajustes para ordenar el desequilibrio económico que encontró al asumir en 2015.

El Banco Central argentino anunció el mismo domingo que endurecerá las restricciones cambiarias que comenzó a aplicar el mes pasado e impondrá un nuevo límite a la compra mensual de dólares. Las medidas iban a ser detalladas ayer.

La Bolsa de Buenos Aires subió un 6,15% al iniciar la sesión.

Los resultados de las elecciones que han dado el triunfo a Fernández son fruto de un proceso de unidad del peronismo, que estaba muy dividido tras la derrota de 2015, y confirman la polarización política en el país.

Entre las felicitaciones recibidas por el vencedor estaba la del FMI, que expresó su disposición a trabajar con el nuevo Ejecutivo para «encarar los desafíos económicos» del país, al que la institución otorgó un préstamo de 57.000 millones de dólares a cambio de un ajuste fiscal que frenó aún más la economía. Todavía falta la entrega de 13.000 millones. Fernández aseguró en varias ocasiones que cumplirá con el pago.

Juntos por el Cambio, la coalición macrista, retuvo la Alcaldía de Buenos Aires con Horacio Rodríguez Larreta, que repite al conseguir el 55,51% de los votos. Pero el candidato peronista Axel Kicillof superó a María Eugenia Vidal por más de 13 puntos y será el nuevo gobernador de la provincia de Buenos Aires.