¿Quién no recuerda la victoria de la temporada pasada frente al Real Madrid? El Deportivo Alavés llevaba diez años sin ganar al equipo madridista y el año pasado, con Abelardo al frente del barco y con un gol de Manu García en el último minuto, consiguió terminar con la maldición.

No obstante, y tal y como asegura Asier Garitano, «lo del año pasado no sirve para nada»; solo sirve para colorear las conversaciones de los aficionados, para contar batallitas, para guardar esa pizca de esperanza, para mantener la ilusión de que se pueda volver a repetir. Se puede, sí; pero para ello el Alavés deberá duplicar los esfuerzos.

El Real Madrid de la segunda etapa de Zidane no es el mismo que el año pasado, ha conseguido mantener cierta regularidad, aunque no del todo. En el seno madridista chirría el empate frente al Betis o la derrota de Mallorca –su única derrota liguera– pero aun así se mantiene en el coliderato, empatado a puntos con el Barcelona y con un intratable Karim Benzema como gran amenaza.

En Champions tampoco le va tan mal a pesar de empatar frente al Brujas en la primera jornada. Volvió a empatar esta misma semana frente al PSG pero la imagen que mostró fue totalmente distinta; es por ello, que el Alavés deberá andar con ojo durante los 90 minutos.

Equipo compacto

El Glorioso está en su mejor momento. Acumula dos victorias consecutivas, algo que necesitaba como agua de mayo. Consiguió vencer al Eibar a domicilio, otra cosa que tenía pendiente desde hace ya semanas. Ganar a domicilio era el gran reto de Asier Garitano y compañía, por si llegaba el día en el que no pudieran ganar en Mendizorrotza.

Porque tampoco es fácil mantener la regularidad como local y menos aún cuando llegan las visitas de los mejores equipos. Y, tarde o temprano, todos visitan Mendizorrotza.

El “gran” logro de Garitano puede ser el hecho de mantener el nivel juegue quien juegue aunque es evidente que ya tiene un once tipo. La última jornada introdujo bastantes variaciones –algunas obligadas como, por ejemplo, el eje de la defensa con Ely y Navarro– y el equipo fue competitivo. Jugó con un delantero puro, Vidal pasó a la mediapunta, y Burke jugó de inicio hasta el final, mostrando un notable nivel.

Ha conseguido crear un equipo compacto y eso es lo que le llevó a la victoria en Ipurua. Por momentos pareció sufrir cada internada de Orellana pero cada vez que achicaba aguas mostraba signos de vitalidad. La contra es su estrategia cuando el rival tiene el esférico y se espera que hoy haga un master en ese aspecto, frente a un equipo especialista en los contragolpes.

El Real Madrid ha demostrado ser especialista en las transiciones defensa-ataque pero no tanto en ataque-defensa y Garitano buscará atacar esa debilidad. Está por ver si vuelve a alinear a dos delanteros y si vuelve al trivote tradicional conformado por Pina, Wakaso y Manu García –que vuelve a estar disponible después de cumplir un partido de sanción–.

El técnico de Bergara también tendrá disponible a Laguardia, que perdió el partido de Ipurua por acumulación de tarjetas. Tiene a toda la plantilla disponible y no resulta sencillo hacerse una idea la convocatoria.

Benzema, insustituible

Zinedine Zidane, por su parte, pierde a una pieza importante como es Eden Hazard, que cayó lesionado frente al PSG. Además del belga, James Rodríguez, Asensio, Lucas Pérez y Nacho tampoco viajan a Gasteiz.

Después de disputar el martes la cuarta jornada de la Champions League se prevé que el técnico merengue realice rotaciones, por pequeñas que sean. El único insustituible es Karim Benzema, que está de dulce tanto en liga como en Europa. Es probable que Militao sustituya a Varane o que Luka Modric vuelva a la titularidad después de su suplencia frente al PSG.

El reto es mostrar «una gran versión»

«Cuando tengamos el balón, iremos a por el Real Madrid; cuando no lo tengamos, defenderemos y trataremos de minimizar las virtudes de ellos». Así espera enfrentar a uno de los mejores equipos de Europa: «Puedes tener una idea pero el rival es otra historia».

El de Bergara compareció ayer ante la prensa para analizar el duelo frente al Real Madrid y advirtió de que «este Real Madrid no es el mismo del año pasado; esta temporada están mejor».

«Es bueno en el juego posicional, en transiciones, domina las áreas... Necesitas mostrar una gran versión», indicó el técnico albiazul. Y no solo dependerá de la versión, según Garitano, será importante «que todas las cosas sean favorables» respecto a la suerte.

Valoró positivamente la dinámica del equipo por lo que dio más valor a la victoria de Ipurua que la cosechada el año pasado frente al Real Madrid: «Lo del año pasado no sirve para nada». A.U.A.