El Instituto de Estadística francés (Insee) ha hecho pública su estadística correspondiente al periodo 2007-2017. De acuerdo a ese estudio, recogido por “Mediabask”, la población en el norte vasco aumentó en un 9,6% en diez años, hasta situarse en los 309.673 habitantes.

Ese aumento de población no es ni mucho menos homogéneo. Por territorios, Lapurdi es el que sigue atrayendo mayor volumen de población, ya que su censo aumentó en el citado periodo en un 11% (26.099 habitantes más).

Ese aumento corrobora la de por sí gran preeminencia demográfica de Lapurdi, que concentra al 80% de la población de Ipar Euskal Herria, es decir, 263.157 habitantes.

Por localidades, la capital labortana pasa la barrera de los 50.000 habitantes (51.228). Aunque ha perdido 300 habitantes en los últimos cinco años, Angelu es la segunda ciudad de referencia, con 38.929 personas censadas en el municipio limítrofe con Baiona.

La estadística confirma las dificultades de la tercera villa del BAB para retener población. Biarritz perdió un 5,3% de su población entre 2007 y 2017, aunque ha conseguido corregir mínimamente su curva en los últimos cinco años, en que ha ganado 74 habitantes, hasta situarse en un total de 25.404.

El cinturón de la capital labortana, el polo que integran seis localidades –Lehuntze, Mugerre, Hiriburu, Urketa, Milafranga y Ahurti– sigue atrayendo a un número de habitantes muy importante.

De hecho, en diez años, la población ha progresado en esa zona en más de un 15%. También el polo del Errobi, que incluye a localidades como Larresoro, Uztaritze, Basusarri, Arrangoitze, Itsasu, Kanbo o Ezpeleta, registra un aumento del 16,2% de la población, aunque este se reparte de forma desigual.

De hecho, cuanto más al interior el aumento de población es menor, es el caso de Kanbo y Ezpeleta, que entre 2012 y 2017 registran pérdidas sostenidas de población.

Una excepción a destacar, ya en el Lapurdi interior, es la de Hazparne, que gana más de mil habitantes en esa década.

Esa curva es igualmente favorable en una localidad limítrofe, aunque situada ya en Nafarroa Beherea, Izturize (+27,2%).

Globalmente, en Nafarroa Beherea hay 24 municipios que han perdido población, frente a 49 que han visto aumentar su censo. Destaca el aumento el 11% en Bidaxune, pero también el 24% de Akamarre y el 21% de Samatze.

La costa empuja

El polo del sur labortano ha ganado casi 10.000 habitantes. En el mismo, solo Getaria, Biarritz y Ziburu pierden habitantes. Una mirada al precio cuadrado de la vivienda en esas tres localidades arrojaría bastante luz sobre esa tendencia.

Destaca el aumento del 33% que registra la localidad de Urruña, aunque la vecina Senpere, con un 30%, marca también un fuerte ritmo de crecimiento. En Hendaia se registra un aumento poblacional más moderado, del 18%.

Solo el polo de Iholdi-Oztibarre y Zuberoa en su conjunto acusan pérdidas de población entre 2012 y 2017 (3.761 habitantes frente a 3.699). En la zona de Garazi-Baigorri se mantienen las cifras de población, al igual que en Amikuze.

La desertificación de Zuberoa sigue siendo un hecho (-4,1% en diez años ). Esa tendencia se ha agudizado además en los últimos cinco años en los que ha aumentado el ritmo de pérdida, que se cifra en ese quinquenio en los 439 habitantes, frente a la pérdida de 192 ciudadanos entre 2007 y 2012.