Beñat Intxausti (Zornotza, 1986) anunció ayer en Bilbo su retirada como ciclista profesional «con la tranquilidad de haberlo dado todo y no rendirme nunca en el final. Me quedo con buenos recuerdos de mi época buena, agradecido a toda la afición, a la gente que me ha animado siempre. He tenido mucha suerte con la afición vasca y con todos los equipos, en los que he estado muy a gusto y que siempre han sido muy buenos. Eso me hace sentir muy agradecido. La pena es no haber podido disfrutar de los años en el Sky».

Pone fin así a trece años como profesional en Nicolás Mateos (2007), Scott (2008), Fuji (2009), Euskaltel (2010), Movistar (2011-15), Sky (2016-18) y Euskadi Murias (2019), en los que logró dos etapas en el Giro (2013-15), la general de Asturias (2012) y Beijing (2013). Fue segundo en 2010 y cuarto en 2011 en la Itzulia, tercero en Polonia (2014), cuarto en Dauphiné (2015), quinto en Romandia (2011) y octavo en el Giro (2013). Por encima del calvario padecido desde que un virus le atacó en 2016 en su mejor momento, destaca a GARA que «he logrado victorias en carreras muy importantes. Ha habido muchas cosas buenas a parte de lo malo de los últimos años».

A la hora de repasar su carrera recuerda que «en el segundo año amateur me salieron las cosas muy bien, empecé a recibir ofertas y me gustó mucho la de Matxin. El Saunier crecía y él apostó por mí. Al acabar patrocinio fiché por Euskaltel, un año que a nivel deportivo y personal fue muy bueno, pero no encajamos negociando el contrato».

Los mejores años en Movistar

Intxausti recuerda que «tenía ofertas muy buenas y decidí cambiar al Movistar, que era un equipo de los mejores y me dio una estabilidad deportiva muy buena de cinco años. Rendí muy bien, conseguí victorias importantes, ganamos el ranking por equipos con mis puntos y tengo buenos recuerdos y el malo del fallecimiento de Xavi Tondo».

Fichó por Sky y «en mi primera carrera fui tercero en la Vuelta a Valencia ganada por un compañero, pero ahí empezó el dichoso problema de la enfermedad, un calvario de altibajos sin encontrar el tono de pedal y de rendimiento. Lo he intentado una y otra vez, pero el último año no alcancé el nivel de antes a pesar de estar bien de salud. Fui de menos a más hasta mayo, pero a partir de ahí no mejoraba y desde el verano empecé a mentalizarme con la idea de lo que podía pasar. No me encontraba con ánimo de correr, veía que no progresaba y las carreras no me fueron bien. Era mi última oportunidad de demostrarme que podía llegar a mi nivel. He hecho todo lo posible, pero no rendía como quería y eso me ha hecho tomar esta decisión».

Agradecido a Xabier Artetxe y enamorado con el Giro

Beñat Intxausti destaca que «Xabier Artetxe es la persona que más me ha ayudado deportivamente. Me ha hecho mejor. Si no fuera por él no habría sido ciclista profesional. Empezó todo con él en un proyecto nuevo de Seguros Bilbao con corredores juveniles y de esos primeros años pasamos muchos de ese equipo a profesionales. Desde entonces hemos tenido una relación personal y profesional paralela de mucha confianza hasta el final. Estuve dos temporadas sub’23 muy buenas en Seguros Bilbao y pasé a profesionales con 20 años. Había miedo, parecía precipitado porque en 2007 empezaba el Pro Tour, se dudaba con los jóvenes, en aquellos tiempos no era habitual pasar con 20 años. Matxin siempre ha tenido buen ojo para fichar talento joven, me ofreció un contrato de cuatro años y pasé en 2007 con el Nicolás Mateos, el filial del Saunier Duval».

Coincidió con Xabier Artetxe un año en el Movistar y en Sky. Con el equipo navarro alcanzó su mejor nivel en el Giro, con dos etapas y un octavo puesto en la general en tres participaciones: «Las dos etapas y subir al podio con el maillot rosa fue lo más, un momento cumbre. Soy de los pocos vascos y el único vizcaíno que ha vestido ese maillot. Siempre he dicho que me he sentido muy a gusto, me ha encantado Italia, el recorrido, la afición, las fechas, el ambiente... He tenido con el Giro un enamoramiento, mi carrera preferida, la tenía controlada... Además era mi época buena en abril-mayo, aunque al principio de año andaba bastante bien, subía al podio en Valencia y Andalucía. Con el calor sufría más en verano».

Así se le atravesó el Tour: «El primer año en 2011 fui trastocado tras morir Xavi Tondo y en la primera etapa me rompí el codo. En el segundo me puse enfermo. Me ha ido mal y con el calor no me he sentido a gusto allí».J.I.