Beñat ZALDUA
DONOSTIA
Entrevue
RICARD VILAREGUT
VICEPRESIDENTE DEL CIEMEN Y COORDINADOR DE LA ESCUELA SOBERANISTA

«La gran decisión de ERC, si gana, será si se va con los Comuns o pacta con el espacio de Convergència»

Tras trabajar codo a codo con Dolors Sabater en la alcaldía de Badalona, tercera ciudad de Catalunya, Ricard Vilaregut ha vuelto al Ciemen, entidad que trabaja en torno a las naciones y pueblos sin Estado. Desde ahí coordina también la Escuela Soberanista, que a mediados de febrero reunió en Donostia, con Iratzar de anfitrión, a 157 cuadros de Euskal Herria, Galiza y Països Catalans.

Sinn Féin en Irlanda, SNP en Escocia... parece que el soberanismo de las naciones sin Estado no estaba tan muerto.

El 1-O en Catalunya y antes el No en el referéndum de Escocia hicieron que algunos diesen por amortizada la ola democratizadora que venía de los pueblos y naciones sin estado, pero sigue estando vigente, seguimos en plena ola. Y la razón es que los movimientos de estos países, también en Euskal Herria y Catalunya, y de otra forma en Galiza, siguen fuertes. Eso es lo importante, porque para incidir en la realidad hay dos opciones: observar la coyuntura que la realidad presenta y aprovechar las oportunidades; y si no hay oportunidades, generar movimiento para que se den estas oportunidades. El repertorio de acción colectiva de un movimiento debe evolucionar e innovar constantemente.

¿En qué dirección?

Lo más importante es hacer las preguntas adecuadas; preguntas del siglo XXI y no del XX, cuestiones vinculadas al contexto concreto. ¿Cuáles son? No lo sé, ya me gustaría.

Viene de Catalunya. ¿Cuáles son las preguntas allí ahora?

Para mí, en Catalunya se abre un escenario de oportunidad. Sabemos que no podemos esperar nada relevante y sustancial del pacto de gobierno entre Unidas Podemos y PSOE; lo único que tendremos es paz social y no agresión, y eso es bueno, porque para mí significa que tenemos cuatro años para reforzar movimientos, también en Euskal Herria y Galicia. Respecto a Catalunya, creo que los actores políticos y sociales, además de pelearse todo el día, deberían hacer un checklist de lo que ha fallado, también de las estructuras que faltaban; remediarlo y volver a intentarlo.

No parece cosa fácil con unas elecciones a la vista.

Están en campaña, y todo lo que dicen en campaña tiene un valor muy relativo. Que hagan las elecciones, se repartan el poder de una vez y a ver si nos volvemos a encontrar todos, en el sentido más amplio posible, para preparar el próximo embate.

¿Y si el resultado de las elecciones anunciadas por Torra viene a ser el mismo?

Nadie puede esperar grandes cambios, pero la variable electoral e institucional es solo una variable más a tener en cuenta. Para mí no es la principal. La acción institucional es producto de un trabajo previo en la sociedad; por tanto, lo que tenemos que hacer es trabajar en la sociedad y buscar cambios profundos. En Catalunya, por ejemplo, lo fundamental debería ser crear un movimiento sindical potente y fortalecer la economía social y cooperativa. Eso es lo que entiendo que se debe hacer en 5-10 años, es lo que nos permitiría aprovechar mejor otra oportunidad futura.

Aún siendo así, conoce bien el panorama político independentista y de izquierdas. ¿Nos hace un repaso?

Vamos a ello. Convergència i Unió todavía tiene un problema de refundación muy potente. Creo que incluso afectará a la fecha de elecciones, que yo la preveo más para finales de año que para junio, porque es evidente que la antigua CiU no convocará hasta que no sepa quién es, qué quiere y quién lo lidera.

Esquerra y el sorpasso.

Es el partido catch all ahora mismo, el partido de referencia al que todo el mundo se acerca porque huele poder. La gran decisión de Esquerra, que supongo que la tomará después de las elecciones, es si se va con los Comuns o pacta con Convergència. Creo que esta es la gran duda que tenemos en Catalunya. Dependerá también, en gran medida, de los Comuns, porque son ellos los que tendrían que conseguir que el PSC les vote.

Una de las hipótesis es que haya un gobierno de Esquerra y los Comuns con apoyo variable dependiendo del tema. ¿Qué problema hay? Que no tendrán los votos suficientes para la investidura y tendrán que conseguir que PSC o Convergència les vote. Esquerra les puede decir a los Comuns ‘bueno, si no consigues el apoyo del PSC para la investidura, me voy con Convergència’. Eso siempre en la hipótesis de que Esquerra quede primera.

¿Cuál es el papel de la CUP en el Parlament?

La CUP tiene el problema que tienen los partidos-movimiento, que generan muchas contradicciones difíciles de resolver; la CUP tiene el alma y la idea de movimiento, y es muy difícil que opere con las reglas de la democracia representativa. Eso explica muchas tensiones. Creo que su punto fuerte sigue siendo el proyecto municipalista, y el modelo más potente es el de Badalona o Girona [donde se han unidos a fuerzas vinculadas a los Comuns y a otros movimientos de izquierda]. Creo que ese marco podría expandirse y consolidarse, siempre que apuesten por modelos más inclusivos, lo cual también quiere decir ceder poder.

¿Y los Comuns? ¿Qué hay más allá de Colau?

Muchos lo vimos como un proyecto político con el cual se podía hacer un camino conjunto, pero la marcha de Xavi Doménech representa el final del proyecto de los Comuns tal y como se había creado en 2014. Es una lástima, porque ha dejado un gran hueco. De hecho, uno de los espacios en disputa ahora mismo en Catalunya es ese sector que está entre la CUP y los Comuns, e incluso parte de Esquerra; si la CUP se abriese a él, hay un espacio muy potente que incluso puede decantar mayorías. Dicho de otro modo, desde la óptica del soberanismo de izquierdas, el espacio que representa Dolors Sabater [la líder de Guanyem Badalona] es ahora mismo es el espacio en disputa en Catalunya.

 

«La Escuela Soberanista nace para pensar colectivamente»

Más de 150 personas para debatir un fin de semana de febrero en un polígono. No esta nada mal. ¿Qué es esta escuela soberanista?

La escuela nace a partir de 2016 a raíz de diferentes contactos que se hacen a través del Ciemen, que es una entidad que en Catalunya actúa como rótula entre diferentes actores políticos y sociales vinculados al soberanismo. En contacto con diferentes fundaciones, vimos que era necesario crear un espacio de relación para poder pensar colectivamente entre las diferentes fuerzas y espacios políticos y sociales del soberanismo de izquierdas de todo el Estado.

El objetivo es hacer diagnosis reales, fieles a la realidad, para lo cual lo que hace la escuela es traer a diferentes cuadros, jóvenes preferentemente, de diferentes territorios para hacer diagnosis conjuntas a través de una perspectiva inductiva.

¿Qué significa?

A diferencia de hace algunos años, la idea no es que venga alguien, nos de la chapa y luego lo comentemos en el bar. Utilizamos una metodología para pensar colectivamente, se explica el tema con una introducción y, en mesas de 10-11 personas hablan entre ellos; recogen lo hablado en actas y eso sirve de base para los análisis compartidos. Evitamos así que sea un análisis construido directamente desde arriba.

¿Dónde ponen el foco?

Es difícil decirlo, porque no hay solo uno. Por ejemplo, para mí, uno de elementos fundamentales en la actualidad es el mundo del trabajo. Creo que en las últimas décadas, en la izquierda en general, hemos apostado mucho por luchas culturales, necesarias e importantes, pero en cierta medida no se ha prestado mucha atención al mundo del trabajo, a las condiciones materiales del trabajo de las personas. Hay cierta desconexión entre el mundo sindical clásico y los movimientos sociales más vanguardistas; creo que tenemos que ser capaces de volver a situar el tema del trabajo como un elemento central en el análisis de la izquierda. Y el papel de sindicatos como ELA, LAB, CIG o Intersindical es fundamental aquí, porque ellos también están en contacto con los movimientos sociales.

Por otro lado, creo que debemos tejer alianzas con las fuerzas de la izquierda democrática en el Estado español. O más que alianzas, buenas relaciones. Con Podemos y con otros; hay sobre todo una gran noticia que es Adelante Andalucía, con Teresa Rodríguez y compañía, que puede ser un posible aliado del soberanismo de izquierdas. Creo.B.Z.