Tras una última jornada de recuperación, el Ibex pudo cerrar la semana con un alza del 0,64%, después de anotarse ayer un 1,42%. El próximo lunes comenzará con 6.893,40 puntos. Pese a los bandazos de esta semana, en la que llegó a cotizar por debajo de los 6.800 puntos, los inversores se mantuvieron firmes en sus posiciones, sin que las noticias sobre el avance de la pandemia terminaran por derrotarles. No obstante, todos los analistas esperan ver una evolución más pesimista si se alarga esta presión del aumento de contagios hasta finales de año.

Por oro lado, en Europa se respiraba cierta tranquilidad al conocerse que la actividad manufacturera, de acuerdo a las primeras lecturas del índice PMI, sigue fuerte en octubre, a pesar de la nueva ola de pandemia. En la zona euro sube hasta los 54,4 puntos, frente a los 53,1 esperados. Alemania, por su parte, sorprendía al llegar hasta los 58 puntos, por encima de la previsión de 55,1. En el lado negativo se encuentra el sector servicios de la zona euro, más afectado por las restricciones, que cae hasta los 46,2 puntos, desde los 48 anteriores. También era mala la estimación del PMI compuesto, con su descenso hasta los 49,4 puntos, tras alcanzar en septiembre 50,4.

En las plazas europeas se impusieron los avances: Fráncfort ganaba un 0,82%; París, un 1,20%; Milán, un 1,09%; y Londres, un 1,29%. Por el contrario, la de Nueva York se movía en rojo una hora después del cierre en Europa, pese a haber partido al alza.

Los mejores del Ibex fueron Sabadell (5,17%) y Meliá (5,76%). De los grandes, todos en verde menos Iberdrola (-0,28%), destacaron Santander (3,35%) y BBVA (2,80%). Las acciones de Solaria (-3,07%) cosecharon la pérdida más abultada.