«Es un fracaso que cualquier persona que intente mejorar su vida la pierda cruzando el río». Así lo manifestó ayer la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales de Lakua, Beatriz Artolazabal, en alusión a los migrantes fallecidos en el Bidasoa. Una realidad «dura y dramática que se intenta evitar».

Artolazabal realizó estas declaraciones durante su comparecencia en la Comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Jusicia del Parlamento de Gasteiz, donde presentó el VI Plan Intercultural de Ciudadanía, Inmigración y Asilo 2022-2025.

Según explicó, el documento supone «una oportunidad para poder manifestar el rechazo a la xenofobia y al racismo, de una forma clara y contundente», y para que «las personas que quieran vivir en la sociedad vasca puedan hacerlo con todos los derechos y obligaciones».

Remarcó que «hay que hacer posible su integración social, laboral, educativa y lingüística», e indicó que el plan pone «especial atención» en las mujeres extranjeras y en los menores sin acompañamiento familiar.

El plan prevé una inversión de 35,7 millones de euros para desarrollar 103 acciones agrupadas en tres bloques (estratégicas, organizativas y programáticas), que enfocan los trabajos desde tres perspectivas: género, derechos humanos e idioma.

«Es un plan basado en los valores humanistas que siempre ha defendido el Gobierno independientemente del origen de las personas; es un valor a proteger en un momento político e histórico tan complicado, no solo en Euskadi y el Estado sino a nivel europeo y mundial», afirmó Artolazabal.