Javi COLMENERO EUROPA PRESS
BEGIRADA

Vuelve el control extremo a la muga

Cualquier excusa es buena para llenar de policías y controles la frontera en el Bidasoa. Ya ocurrió con la cumbre del G7 en Biarritz, con la pandemia del covid, con las personas migrantes... y ahora el pretexto es la reunión de la OTAN en Madrid. Es más que dudoso que esos controles vayan a aportar algo a la seguridad de la cumbre. Tal vez solo sea una demostración de fuerza para recordar a todo el mundo que siguen aquí; un nuevo ejercicio práctico de la existencia de una frontera impuesta que parte en dos un país.