Los trabajadores y trabajadoras de Ingeteam Converters de la planta de Ortuella han iniciado una huelga indefinida tras más de seis meses y trece reuniones «sin resultados» con la dirección de la empresa. Reclaman la actualización del convenio, con salarios acordes al sector, especialmente en un año en que la empresa ha registrado su récord de beneficios, y una readaptación de la carga de trabajo y de las medidas de conciliación.

A convocatoria de ELA, la plantilla se concentró ayer ante las oficinas generales del Grupo Ingeteam en el Parque Tecnológico de Zamudio, desde donde el delegado del citado sindicato César Ibarrondo confirmó a GARA que la huelga iniciada la pasada semana se alargará indefinidamente.

La planta de Ortuella cuenta con una plantilla compuesta por 269 personas, y los nueve representantes del comité de empresa son de ELA. Los datos aportados ayer reflejan que en 2024 Ingeteam tuvo 124,2 millones de euros de beneficio, frente a los 37,8 millones de 2023, y se repartieron 16,8 millones en dividendos.

«Ingeteam ha registrado su récord de millones en beneficios, lo que hace aún más incompresible su negativa a mejorar las condiciones de su plantilla», criticaron. Los representantes de los trabajadores advirtieron de que la huelga «se mantendrá hasta que la empresa presente una propuesta real y digna». «La plantilla ha demostrado responsabilidad, unidad y capacidad de negociación. Ahora es la dirección quien debe estar a la altura», exigieron en este sentido.

Según detalló Ibarrondo, la huelga se limita a la planta de Ingeteam en Ortuella, creada hace seis años. Aunque el Grupo cuenta con otros centros de trabajo en Euskal Herria, se trata de «plantas independientes, cada una con su propio comité de empresa».