Las cuentas que presentará el Consejo de la Real en la Junta de Accionistas del 17 de diciembre presentan una previsión de superávit de más de 40 millones de euros gracias a los ingresos extraordinarios registrados por la marcha de Illarramendi y la clasificación para la fase de grupos de la Liga de Campeones.

La Real prevé recaudar al menos 95 millones esta temporada, cifra que se incrementaría en un millón por cada victoria que consiga ante Shakthar y Bayer Leverkusen. Los gastos previstos no llegan a los 55 y esos 40 millones de superávit van a dar un vuelco radical al balance de situación de la entidad. Los datos situados en la parte superior reflejan cómo ha pasado la Real del infierno al cielo, en lo económico y en lo deportivo, en el mandato del Consejo.

Jokin Aperribay recordó que las primeras cuentas de la temporada 2008-09 «nos las entregan los administradores concursales, no fueron formuladas y aprobadas y la Real se debía disolver si no se cambiaba la cifra de patrimonio neto contable a efectos de disolución».

Recordó que para cambiar esa situación se llegó a un acuerdo para convertir la deuda con las instituciones en préstamos participativos y se activó el uso del campo. Desde entonces la Real ha cerrado con beneficios los cuatro ejercicios, la pasada temporada de 668.782 euros, y eso unido a los más de 40 de superávit de esta temporada va a provocar que en cinco años se pasen de tener unos fondos propios negativos de 43 millones a unos positivos de casi siete.

Si llegamos a gastar 7 millones...

El presidente blanquiazul hacía una reflexión: «Si llegamos a gastar siete millones de euros más, los fondos propios serían negativos. Los ingresos extraordinarios nos han permitido dar la vuelta al calcetín, pero el equilibrio presupuestario es la mejor aspirina para la Real. Tenemos que ser más prudentes porque eso nos permite sanear las cuentas de la Real y establecer un camino que muy pocos clubes en Primera lo tienen».

Los ingresos extraordinarios han llevado al Consejo a no subir las cuotas de los abonados esta temporada y a no cobrarles ningún día del club. Aperribay también comunicó la decisión del Consejo de repartir más dinero entre los clubes convenidos por jugar la Champions.

Esas medidas pueden ayudar a cerrar la pérdida de abonados registrada por la crisis. A pesar de vivir una temporada inolvidable, la Real ingresó menos dinero que en anteriores ejercicios por abonados y taquillas. También en casi todos los demás apartados.

Sin embargo, la pasada campaña se cerró con un superávit importante gracias al aumento de los ingresos televisivos, que pasaron de 16,3 millones de la anterior a los 23. Esta ascenderán a 25. El nuevo contrato con Canal + supone más del 51% de los ingresos ordinarios del club.

Los ingresos de la pasada temporada alcanzaron los 44,6 millones. En los casi 44 de gastos la mayor parte se los llevó el primer equipo, que costó 24 millones, el 83% del gasto de personal. Además se destinaron 2,2 a la amortización de traspasos, cifra similar a la de esta campaña.

A los datos de la SAD hay que añadir 1,9 millones de las cuentas de la Fundación. La Real aportó 288.000 euros la pasada temporada y 411.000 ésta.