El Laudio se llevó el amistoso de Ellakuri (1-0), gracias al penalti transformado por Kepa delOlmo nada más comenzar la segunda mitad. Por parte rojiblanca, el encuentro solo pasará a la historia por haber permitido a un nuevo cachorro, Iñaki Williams, debutar con el primer equipo, aunque no fuera de forma oficial. A los alaveses les queda, sobre todo, la satisfacción de haber derrotado al Athletic ante su afición.

Poco hubo que comentar en el terreno estrictamente futbolístico. Entre otras cosas porque el campo, pesado por la cantidad de lluvia caída en las últimas jornadas, tampoco daba para muchas alegrías. El Athletic -que se había dejado en casa a una decena de jugadores, los tocados De Marcos, Iturraspe, Laporte, Aduriz, Balenziaga y Kike Sola, además de Gurpegi, Iraola y Muniain- jugó de inicio con Iraizoz, Albizua, Etxeita, Ekiza, Saborit, Beñat, Herrera, Aketxe, Susaeta, Guillermo e Ibai. Por parte local, Ramón Castelo alineó a Herrera, Gorka Martínez, Artabe, Gaizka Bergara, Juaristi, Casado, Joseba del Olmo, Eraña, Luariz, Agirre y Beltrán.

No resultó especialmente atractivo el primer tiempo, en el que el Laudio y los jugadores más jóvenes de Ernesto Valverde ponían la ilusión y las ganas de hacerlo bien y el resto se aferraba a la profesionalidad. No sirvió para que se moviese el marcador, pero los aficionados que, en buen número, se acercaron a Ellakuri disfrutaron por momentos.

Ya en la segunda parte llegó el esperado debut de Iñaki Williams. El espigado delantero del Baskonia batió récords goleadores la temporada pasada en juveniles y este año ya ha tenido la oportunidad de debutar -y de marcar- con el Bilbao Athletic, cuando Guillermo ha sido citado con el primer equipo. Su compañero en el Baskonia Aitor Seguín, que ya había tenido la oportunidad de estrenarse en otro bolo, también saltó al campo en la segunda parte, al igual que Guarrotxena, Magdaleno y Guillermo -Aketxe había jugadio de inicio-. Completaron el nuevo once Herrerín, Albizua, Ekiza, San José, Morán, Mikel Rico y Toquero. También Castelo refrescó su equipo, alineando ahora a Herrera, Del Álamo, Jarein, Larrainzar, Larruzea, Lombera, Degre, Tyson, Kepa del Olmo, Luariz y Salcedo.

La jugada decisiva del choque llegó nada más arrancar este segundo tiempo, con un penalti de Iago Herrerín que transformó Del Olmo. Al margen de la voluntad de demostrar su capacidad de los chavales, poco más ofreció el partido, en el que el Athletic solo amagó con mover el marcador con un remate de Williams y un disparo de Rico.

Poca intensidad

Reconocía Ernesto Valverde tras el encuentro que éste no fue precisamente merecedor de ser guardado en la videoteca. «Para ganar este tipo de partidos y para afrontarlos, tenemos que venir dispuestos a competir de verdad. Y a nosotros nos ha faltado un poco de intensidad en algún momento», confesó el técnico que, pese a todo, encontró la manera de regresar satisfecho al campo. Bien porque la derrota pudo servir para dar un «toque de atención» al equipo, bien, sobre todo, porque pudo «ver a algunos jugadores que conocía menos, como Seguín o Williams. En ese sentido, el partido me ha gustado».

Además del debut de Williams, y la posibilidad de hacer méritos del resto de cachorros, la cita sirvió como campo de pruebas. Restó importancia Valverde a la coincidiencia de Herrera y Beñat en el centro del campo en el primer tiempo porque se debió sobre todo «a la necesidad de distribuir a los jugadores en dos equipos», pero más relevancia puede tener la presencia de Albizua en el lateral derecho. «Defensivamente es fuerte y para determinados partidos nos puede venir bien. Necesitamos un recambio para Andoni -admitió-, que puede ser De Marcos pero tiene que mejorar defensivamente. En cambio Albizua nos da ese perfil un poco más defensivo que necesitamos a veces. Estamos trabajando con él en esa posición».

Respecto a la punta de ataque, donde hace falta sustituto para Aduriz en Málaga, Valverde probó con Guillermo en la primera parte y Toquero en la segunda, y aseguró que todavía no ha decidido nada al respecto.