Raimundo Fitero
DE REOJO

El patio

Está nuestro dial televisivo revuelto. MTV cierra su señal española, su espacio lo ocupará Real Madrid TV, mientras Intereconomía sigue en su autodestrucción, ahora cargándose el único programa que le daba entidad, «Punto Pelota», y lo hace de malas maneras, prohibiendo el acceso al plató a Josep Pedrerol, colocando a su sustituto de repente y con una actitud solidaria del equipo habitual que se negó a participar. El problema es económico. Les deben varios meses, y parece que no está dispuesto el propietario Ariza a pagarles. El asunto acabará en los tribunales, y Pedrerol, con su malos resultados en La Sexta puede ver cómo de ser una estrella del fútbol nocturno y del madridismo, puede acabar mal, en el canal del su equipo haciendo reportajes y entrevistas para que canonicen a su líder Florentino Pérez que le pagará al día, Y muy bien.

El patio está revuelto porque las audiencias son implacables. Lo de MTV tiene su lógica porque se ha estancado de manera muy caótica, siempre están Alaska y su marido, los programas repetidos de los jóvenes descerebrados de «Gandia Shore» o sus pares de otros puntos del globo, aburren de tanto reponerlos, y las series que a veces colocan buscan un fragmento de audiencia muy poco fiel en cuanto a seguimientos constantes, buscan novedades, no reiteraciones. La deriva de este canal ha sido muy clara hacía el espectáculo juvenil.

Por cierto el dato más alarmante es que el canal 24 horas, está perdiendo audiencia de manera constante. La política de tierra quemada de los actuales responsables de informativos han logrado la desafección de casi un treinta por ciento de su clientela de hace unos meses. Sus resultados son peores que los de otros canales de la TDT que emiten información y debates. Y es cierto, ver el debate de la noche es además de muy tendencioso, muy plano, con un presentador que no parece dar la talla.

Y en el Gobierno parecen rectificar y se van a plantear de nuevo la redistribución de la señales de la TDT y no van a quitarles canales al duopolio, Mediaset y Atresmedia, por lo que serán los pequeños y en especial los de «El Mundo», los que se pueden ver afectados. Hay guerra mediática.