La decisión de la Diputación de Gipuzkoa de aprobar la desanexión de Igeldo y su consiguiente constitución como nuevo municipio ha levantado ampollas en los grupos de la oposición del Ayuntamiento de Donostia. Así quedó constatado a lo largo del día de ayer, después de que todos los grupos políticos comparecieran para dar a conocer su opinión al respecto. Las respectivas ruedas de prensa y declaraciones ante los medios de comunicación no cesaron; comenzaron por la mañana y siguieron por la tarde. Este extremo constata la relevancia de la decisión del ente foral.

Los grupos de la oposición -PNV, PSE y PP- fueron los primeros en salir a la palestra y lo hicieron para mostrar su rechazo a la decisión que ha adoptado el Gobierno de Martin Garitano. No obstante, los dardos estuvieron dirigidos principalmente al alcalde de la ciudad, Juan Karlos Izagirre.

Fue el portavoz del PNV, Eneko Goia, quien anunció la intención de su partido -que luego sería apoyada también por PSE y PP- de llevar a los tribunales el decreto foral que constituye a Igeldo como municipio, al considerar que la maniobra de la Diputación ha sido «ilegal».

Basó su intervención en señalar que la actuación del Gobierno foral durante el proceso ha sido «unilateral y parcial». «Nos hallamos ante una campaña de la izquierda abertzale en la que pretende lanzar el mensaje de que ellos han hecho todo lo posible para que Igeldo sea independiente y que, cuando al final no lo sea, la culpa sea de todos los demás», afirmó.

También se dirigió directamente al primer edil, instándole a que sea «coherente», al recordar que el alcalde de Donostia fue miembro de la asociación Itxas Aurre -principal promotor de la desanexión de Igeldo-.

«La actitud de Izagirre es incomprensible. Tiene que dar la cara sobre Igeldo y explicar a los ciudadanos cuál es su participación en todo este asunto», requirió Goia. No obstante, aseguró que el PNV no impulsará una moción de censura, en alusión a la invitación de PSE y PP para «desalojar» al alcalde.

PSE y PP, juntos

Por su parte, PSE y PP reflejaron su comunión contra Izagirre en una rueda de prensa conjunta, en la que comparecieron los trece concejales que suman entre ambas formaciones. El portavoz del PP, Ramón Gómez, fue el primero en tomar la palabra y fue directo al grano: «Pedimos la dimisión de Izagirre por habernos llevado a esta situación. Creemos que una moción de censura es necesaria; esta situación es insostenible».

Para ello se dirigió al PNV, no sin antes citar todas las veces que han solicitado la moción de censura que han solicitado desde que Bildu gobierna en Donostia, para apelarle por enésima vez que se una a ellos en aras de que esta iniciativa prospere. «Pedimos al PNV que reflexione. Tiene seis concejales y a nosotros nos falta uno para la mayoría absoluta», manifestó.

También adelantó la intención de su partido y del PSE de llevar a los tribunales el decreto foral por el que Igeldo se constituye como municipio, compartiendo la iniciativa del PNV. Anunció que ese trámite se llevará a cabo hoy, ya que la intención de los grupos de la oposición es tratar únicamente el tema de Igeldo en el pleno ordinario que se celebrará a partir de las 13.00. Para ello, retirarán todas sus iniciativas que no tengan nada que ver con la desanexión, para tratar el tema con carácter de «urgencia».

El portavoz del PSE, Ernesto Gasco, destacó que «casi el 50%» de la representación política en el Ayuntamiento de la capital guipuzcoana estaba en la rueda de prensa» y consideró que la desanexión de Igeldo es un hecho «muy grave», que se ha llevado a cabo «por una decisión unilateral de una minoría».

Se dirigió a Izagirre para pedirle, «por coherencia», que dimita y al PNV para que apoye la moción de censura. «Que sea otra persona quien gobierne en Donostia», pidió. «Hoy es el día para saber quién es donostiarra y quién no, y el PNV no puede mirar hacia otro lado», sentenció Gasco.

No costará ni un solo euro

Lo dijo por la mañana y lo volvió a decir por la tarde. «Somos el Gobierno de Donostia y, por lo tanto, defenderemos los intereses de los donostiarras a capa y espada». Estas palabras las pronunció el alcalde de la ciudad, Juan Karlos Izagirre, poco después de las 18.00, en una rueda de prensa en la que anunció que convoca para el 27 de diciembre un pleno extraordinario y monográfico sobre Igeldo.

Sobre la intención de los grupos de la oposición de retirar todos los puntos del orden del día que se tratan en el pleno de hoy, dijo que aún no tenía constancia de que dicha iniciativa estuviera registrada oficialmente.

En este sentido, insistió en que él no eludirá el debate y recordó que, por principios políticos, nunca ha impedido que se hable de cualquier asunto. «Este debate merece un pleno extraordinario. Es la forma para abordarlo con sosiego», defendió.

La ronda de preguntas por parte de los periodistas se prolongó durante media hora. Ante determinadas cuestiones, que hablaban de escenarios hipotéticos, el primer edil declinó hacer cábalas, limitándose a responder a cuestiones concretas. Fue tal la insistencia que Izagirre pidió seriedad.

La atención también se centró en el coste económico que podría suponer a las arcas municipales la desanexión. «Ni un solo euro», repitió varias veces. «Igeldo tendrá que asumir su parte proporcional del endeudamiento de este Ayuntamiento -explicó-. Lo que Donostia no hará será asumir los gastos de los servicios de un municipio vecino».

En lo que respecta a la comisión de arbitraje que gestionará Igeldo hasta las próximas elecciones municipales y forales en 2015, confirmó que estará integrada por tres miembros de Igeldo, tres del Ayuntamiento de Donostia y uno, el que ocupará la presidencia, que corresponderá a la Diputación de Gipuzkoa.

La composición de la comisión gestora, por su parte, será proporcional a los resultados que se registraron en Igeldo en las elecciones forales y municipales de 2011.