GONTZAL F. ASTORKI
RUGIDOS ROJIBLANCOS

Otro importante paso adelante

Poco más se les puede pedir a un partido y a un equipo. El Athletic salió a por el partido, a defender su posición europea y lo hizo de inicio a fin. Enchufado a más no poder, con un gran ritmo y dinamismo, con una banda derecha que se convertía en un cuchillo, con un Ibai en su versión más positiva, con un Iturraspe que no es noticia pero que sigue siendo clave en el juego y en el rigor táctico del centro del campo, con el mejor Herrera -por fin- del curso y un Aduriz enchufadísimo que peleaba por rematar y asistir a sus compañeros, sin perderse en otras batallas difíciles de ganar.

Al descanso el partido era una incógnita. Por saber si el Athletic sería capaz de sostener ese ritmo y por qué daría de sí el Valladolid jugando. No paró el Athletic, siguió a lo suyo, a lo que sabe, a lo que ha interiorizado ya, a eso que se ha convertido en su ADN, buscar el gol, jugar a disfrutar, a no especular. Todo basado en la confianza que el plantel empieza a tener, en lo colectivo y en lo individual, en sus propias cualidades. Que se cerrara con la anécdota del gol de Valdet Rama no impidió que las sensaciones tras el encuentro fuesen inmejorables. Por la aportación a la victoria de la segunda línea, seguramente en el encuentro en que más aportaron los que se alienan justo detrás de Aduriz, tanto en juego como en goles; por la imagen del equipo; por la actitud y entrega; por el nuevo paso hacia adelante. Lo explicó bien Mariño. Al menos, claro. «Nos han pasado por encima» dijo.

Y por último, la sensación o la reflexión que me vino tras el partido. Este Athletic aún conserva trazas de lo mejor del trabajo de Bielsa que tan bien ha aprovechado Valverde, tan solo -que es muchísimo- con cambiar la fusta por la zanahoria y el puntero laser por la tiza de toda la vida, aunque quizás sostenida con la mano izquierda. Vaya historia que empezamos a reescribirle a San Mamés. Inmejorable.