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Escisión en Covite, que pasa al ámbito estatal

Con Consuelo Ordóñez como portavoz, Covite ha protagonizado esta semana un claro desmarque respecto al PP y al Gobierno de Mariano Rajoy. Como colofón, su asamblea anual, que tuvo lugar ayer, ha dado paso a una escisión interna y, al mismo tiempo, a una ampliación territorial.

Tras el intenso cruce de gestos y palabras de reproche que se vivió el jueves en el cementerio de Polloe, primero, y en el Kursaal, después, entre representantes de Covite y dirigentes del PP de la CAV con motivo del 19º aniversario de la muerte de Gregorio Ordóñez en atentado de ETA, ayer la capital donostiarra fue escenario de otra polémica con Consuelo Ordóñez como protagonista por partida doble.

Según los datos recogidos por Europa Press, de los 670 socios que integraban Covite, en la asamblea anual tomaron parte 172 y todos los votos emitidos ante notario fueron favorables al equipo coordinador, por lo que Ordóñez fue reelegida como presidenta.

No obstante, antes de que tuvieran lugar las votaciones, un grupo de socios impugnó la constitución de la asamblea al entender que el quórum no era válido. Desde la dirección de Covite se indicó que esa reclamación incluía «cerca de 30 nombres, pero no sus firmas».

En cambio, el portavoz de ese grupo, Jorge Mota, indicó a la agencia Efe que lo que se había producido era una escisión con la salida de alrededor de 200 socios, por sus «discrepancias» con el actual equipo directivo, que «en breve» constituirán una nueva asociación.

Mota recalcó que las personas que se han dado de baja responden a la definición de «víctimas» según los requisitos establecidos por el Ministerio de Interior, una circunstancia que, desde su punto de vista, «no cumplen muchos de los socios» que fueron admitidos en el último año por la dirección de Covite y que fueron presentados como «amenazados« por ETA.

Ámbito territorial

Mientras se producía esa escisión, la asamblea del «Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco», que es la denominación oficial de Covite, decidía modificar sus estatutos para intentar extender su implantación al conjunto del Estado español. «El ámbito territorial en el que Covite desarrollará principalmente sus funciones comprende todo el territorio nacional de España, con especial dedicación a la Comunidad Autónoma del País Vasco», señala el nuevo texto.

Este cambio estatutario también parece enmarcarse en los enfrentamientos con el PP, en los que este partido cuenta con el respaldo de Marimar Blanco, que el jueves estuvo en el Kursaal. Esta, que fue parlamentaria del PP en Gasteiz, es la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo. Por su parte, Ordóñez estuvo arropada en Polloe por los promotores de Vox, nuevo partido político impulsado por algunas víctimas de ETA.