Las FARC atribuyeron ayer al «estado de necrosis» de las instituciones en Colombia el episodio de supuestas escuchas ilegales del Ejército a líderes de izquierda y a los delegados del Gobierno en las conversaciones con la guerrilla y para el que pide una solución «urgente», al tiempo que volvieron a reclamar la convocatoria de una Asamblea Constituyente. «El estado de necrosis que tiene la institucionalidad colombiana ha llevado a que dentro de las mismas fuerzas militares ya no se pueda generar confianza ni para el propio Gobierno», dijo ayer en La Habana Jesús Santrich, uno de los negociadores de la guerrilla. «Por un lado, el paramilitar (Álvaro) Uribe Vélez controlando hilos, por otro lado las mafias, en la misma situación. Se requiere una recomposición de la institucionalidad, por eso insistimos en la Asamblea Nacional Constituyente», recalcó.