MIKEL INSAUSTI
Zinema kritikaria
CRíTICA: «Kamikaze»

Cómo pasárselo bomba en caso de atentado aéreo

El cine español es diferente, y se nota más cuanto más quiere abordar situaciones coyunturales que ponen a prueba su poco afianzada posición en Europa o en el mundo. Da la sensación de que el debutante Álex Pina ha querido, pero no ha podido reírse de los atentados internacionales, por lo que el incierto resultado de su indefinida ópera prima dista mucho de la insolente y demencial irreverencia del inglés Christopher Morris en su agresiva caricatura de los yihadistas en «Four Lions». Si aquel pecaba de pasarse, éste peca de quedarse corto.

No sé si la omisión es preferible al exceso, pero «Kamikaze» prueba con un imposible cruce entre el melodrama lacrimógeno y la comedia coral. Géneros ambos empleados de forma anacrónica para el tratamiento desdramatizador de un terrible problema actual, ya que tanto la risa como la lágrima que quiere provocar remiten a aquel trasnochado eslogan de Manuel Summers que rezaba: «to er mundo é güeno».

Los españolitos que pretenden viajar en un vuelo de Moscú a Madrid, retrasado providencialmente por una tormenta, se convierten, sin saberlo, en embajadores o mensajeros de la paz. No necesitan haber estudiado la carrera diplomática, ni hacer de negociadores, porque con su simple manera campechana y juancarlista de ser contagian sus buenos sentimientos hasta al conspirador más violento que pueda habitar la tierra del señor.

El malvado con acento, un pobre diablo traumatizado por la pérdida de sus seres queridos a consecuencia de ataques militares rusos, dudará finalmente a la hora de inmolarse y dar su vida por la independencia de una imaginaria exrepública de la antigua Unión Soviética. Bastarán unos días de convivencia con los simpáticos integrantes del pasaje que iban a ser sus víctimas para que salga a relucir su fondo humano, y de acariciar a un perrito pasará a enamorarse de una joven pasajera o a salvar a un niño perdido en la nieve. Pasos éstos que conducen a su liberación de la carga explosiva.