A cuenta del derbi futbolero de San Mamés, Gipuzkoa Basket retrasa su partido frente a Gran Canaria a las 19.00 en Illunbe -sin emisión televisiva-. Los últimos triunfos del conjunto donostiarra -seis victorias en siete partidos- los han puesto a las puertas de los puestos de play offs. Así las cosas, y con el subidón de moral que supuso la victoria en el derbi frente a Laboral Kutxa Baskonia, los pupilos de Sito Alonso se aferran a que todo es posible, tanto en el choque de esta tarde, como de cara al final de la Liga Regular.

«Mentalmente vamos a estar fuertes para jugar», explicaba el técnico donostiarra en la sala de prensa del Buesa Arena, «pero sospecho que necesitaríamos otro masajista». «Si ellos, los jugadores quieren, podemos conseguir lo que queramos, pero es que están rotos. El play off es una cosa muy difícil», reconocía el preparador de Gipuzkoa Basket.

La lesión de Ramsdell, unida a la de Raúl Neto, deja a GBC sin dos de sus hombres más importantes. Cierto que el regreso de Winchester más el paso adelante de Hanley pueden suplir tales ausencias, pero las limitaciones físicas y de rotación impiden el margen de error para los donostiarras. Sin ir más lejos, en el derbi de Zurbano jugadores como Salgado o el propio Hanley padecieron tras el descanso, cuando la defensa de su rival aumentó varios grados su intensidad. Asimismo, Doblas no puede permitirse el lujo de cargarse de personales, ya que es prácticamente el único referente interior del equipo, pese a la indudable brega de Olaizola y un Huskic mejorado en las últimas semanas.

«Nunca he visto un GBC tan fuerte. Por eso hemos dado un golpe sobre la mesa», afirmaba, a pesar de todo, Sito Alonso. «El equipo, ha nivel mental y de sacrificio, tiene un gran nivel, pero la base del equipo está siendo la defensa. Si nosotros defendemos, podemos competir», culminaba el entrenador, que espera de los suyos una actitud similar esta tarde.

Sin Eulis Báez

Mientras, Gran Canaria llega al Donostia 2016 Arena con la plaza en la postemporada matemáticamente asegurada. Así las cosas, Pedro Martínez se ha dado el lujo de prescindir de Eulis Báez, uno de los estandartes de su juego interior, a cuenta de un esguince en los ligamentos de su rodilla derecha.

Esta ausencia se suma a la de Xavi Rey, baja perfectamente suplida por Walter Tavares. El pívot de Cabo Verde está siendo una de las revelaciones de la temporada. Con sus 2,20 metros de alto, Doblas tendrá que roer un hueso bien duro, ya que a su enorme tamaño le une una inusual movilidad y un buen número de recursos. En el puesto de base, Javi Salgado deberá lidiar con los veteranos Oliver y Bellas.