Joseba VIVANCO
El gerente Vizcay asumirá la gestora hasta la convocatoria de elecciones tras el verano, aunque podría prorrogar su «mandato»

Archanco se va, el lío se queda

Las presiones externas y los desmarques de su entorno precipitan el adiós, que se consumará tras presentar el plan de viabilidad.

Los episodios se precipitan en Osasuna desde que se confirmara su descenso a Segunda, pero antes de esa bajada a los infiernos deberá rendir cuentas en un purgatorio en el que el primero en penar culpas ha sido su presidente, Miguel Archanco, que ayer tarde convocó con urgencia una junta extraordinaria para comunicar lo que se daba por hecho tras este nuevo giro de la situación, que dimite, que se va, que lo deja. Será después de que dentro de la primera quincena de junio se presente en la Hacienda foral el plan de viabilidad. A partir de ahí, el 20 de junio, asamblea general ordinaria y convocatoria de elecciones.

La actividad en el club rojillo se ha visto inmersa en una auténtica centrifugadora. Que si se presenta al nuevo entrenador Enrique Monreal y luego ya no, que si asamblea el día 16 y ahora ya no... A media tarde de ayer, Archanco convocó a los miembros de su junta de urgencia. La cita era a las 18.30, pero se retrasó una hora debido a que uno de sus directivos, Txuma Peralta, se encontraba fuera de Iruñea. Comenzada la reunión esta no se alargó. El gerente de Osasuna, Ángel Vizcay, era el encargado de anunciar la dimisión de Miguel Archanco, que dejó El Sadar hacia las 20.15 sin querer hacer declaraciones.

Ángel Vizcay, el encargado de anunciar a los periodistas estas decisiones tomadas por «unanimidad», añadió que Archanco «no ha dado los motivos» de su marcha del club, pero sí avanzó el gerente que cuando la junta directiva dimita se formará una comisión gestora formada por cuatro o cinco empleados del club.

Destacó, además, que debido a los plazos que marcan los estatutos no habría un nuevo presidente hasta finales de agosto o principios de setiembre, por lo que será la comisión gestora la que fichará el entrenador y planificará la plantilla para la próxima temporada en la Liga bajo el asesoramiento de la secretaría técnica.

Vizcay subrayó, igualmente, que la asamblea extraordinaria del día 20, en la que se solicitará la autorización de elecciones a la presidencia, tiene potestad para prorrogar las funciones de la comisión gestora durante un «tiempo determinado» o incluso «una temporada», una posibilidad que ni siquiera habría que desestimar que ocurra.

Y es que tras el cese de Archanco, será el propio Vizcay (Iruñea, 1955), el que asuma la dirección del club hasta las elecciones, terreno que ya se había venido preparando en las últimas fechas asegurando sentirse capaz de liderar ese periodo de transición. Gerente de la entidad osasunista desde 1990, también ha sido delegado (96-97, 98-99 y 07-08) y miembro de la junta gestora que se hizo cargo de la entidad de noviembre de 1997 a febrero de 1998, junto con Tomás Mendívil y José Luis Díez Díaz. Su padre también fue pieza clave en el funcionamiento del club rojillo. Fue gerente, entonces secretario general, de 1946 a 1979.

Así las cosas, el nombre del técnico -sea Monreal o no-, salidas y fichajes quedan en manos de este abogado, celoso guardián de los secretos del club durante más de dos décadas.