Alberto PRADILLA MADRID
Relevo en la monarquía española

Detenciones y cargas de la Policía en un Madrid blindado

Al menos cinco personas fueron detenidas ayer durante el transcurso de las protestas que se desarrollaron contra el recambio borbónico en Madrid. Los tres primeros arrestos se produjeron por la mañana, en Gran Vía, al paso de la comitiva de Felipe de Borbón. Los otros dos (aunque podrían haberse registrado más) tuvieron lugar pasadas las 20.00 horas en la puerta del Sol, donde la Policía cargó contra una marcha pacífica convocada por diversos colectivos. Entre estos últimos se encontraba Jorge Vestrynge, exsecretario general de AP en la época de Manuel Fraga pero que actualmente es un asistente habitual a concentraciones de protesta ante la situación política del Estado.

La orden matutina era no permitir la exhibición de banderas republicanas (lo que no evitó, por ejemplo, que pudiese verse alguna bandera de Castilla). Según la delegación del Gobierno español en Madrid, dos personas fueron detenidas cuando participaban en una marcha (que había sido prohibida aunque logró celebrarse en Tirso de Molina, lejos del «paseíllo» monárquico), mientras que una tercera al proclamar gritos en favor de la República.

Según relataron testigos a GARA, esta tercera persona fue abordada por los agentes y esposada. En este momento, algunos de los seguidores de Felipe de Borbón comenzaron a increparles, aunque no se produjo ningun choque. Otras personas relataron haber sido golpeadas cuando intentaban mostrar las banderas.

Por la tarde, en Sol, la Policía cargó contra una concentración, al tiempo que intentaba dificultar la labor de la prensa. Una trabajadora de ETB fue zarandeada por los agentes, que golpearon la cámara para evitar que filmase. Los antidisturbios trataron de identificar a los asistentes y evitar una manifestación que, finalmente, pudo desarrollarse a través de varias calles de Madrid.

Una nueva calle en Barcelona

Las juventudes de ERC (JERC) renombraron ayer como la Avinguda de la República Catalana a la avenida barcelonesa Príncep d'Astúries. «No tenemos ningún vinculo que nos una con la monarquía ni el Estado español», señaló el portavoz de las JERC, Gerard Gómez que, junto a una decena de miembros de las juventudes, colocó el nuevo nombre. Por su parte, las juventudes de ICV Joves d'Esquerra Verda (JEV) vistieron ayer el monolito de la plaza barcelonesa Juan Carlos I con una bandera republicana. Los presentes reclamaron un referéndum sobre la continuidad de la monarquía. El coordinador de ICV, Joan Herrera, denunció que la proclamación de Felipe de Borbón «no es un acto de coronación sino de imposición».