Jon Odriozola
Kazetaria
JO PUNTUA

Conjugaciones

En el Café Niporesas,el señor don Sinalagmático propuso que se ejerciera el Derecho de Autodeterminación. Don Perifrástico repuso que mejor sugerir el Derecho a la Autodetermina. Por su parte, don Suceso Estocástico, realista, habló del Derecho a la Autodeter. «Humm, no sé», dijo, caviloso, don Cibernético, «¿qué tal el Derecho a la Autode?». «Es factible», dijo don Entrópico, «en democracia cabe todo, hasta yo, pero lo viable, hoy por hoy, mire usted, es el Derecho a la Auto». «Sí,es lo más plausible», consensuaron de consuno los señores Anadiplosis, Antanaclasis y míster Anacoluto, mientras mesié Probóscide asentía, divertido, con la trompa.

Metiéndose en camisa de once varas, el griego Dominikhós Torturikides sostuvo -científicamente- que un cuerpo sumergido en el agua acaba «cantando» -usó esta jerga policial-, pero negó que eso fueran sevicias -usó este tecnicismo penalista-. El jurista don Nanogramo mostró sus dudas en pretérito perfecto: «¿he habido, has habido o ha habido?». Bizarro se puso don Norandrosterona, jurisperito, para preguntarse en pretérito pluscuamperfecto si «¿había habido, habías habido o había habiendo habido?». Solemne se mostró don Hematocrito, philosopho estoico, para inquirir en pretérito anterior si hubo habido, hubiste habido o hubo habido. Y agregó con solvencia: «¿habiendo habido hubo de haber habiendo habido o habiendo de haber hubo lo que hubo de haber habido?». El musculoso don Testosterona, un cimarra que fuera lanzador de martillo, masculló en futuro perfecto -cuando todos esperaban que preguntara si la abuela fuma-: «¿habré habido, habrás habido o habrá habido?». Por último, el doctor en Derecho Canónico don Nomenclátor Arroba Punto Com se expresó en un exquisito subjuntivo, que asombró al foro, de esta manera y no de otra: «¿hubiera o hubiese habido, hubieras o hubieses habido o qué coño (sic) hubiese o hubiere habido?».

«¿De qué tratamos?», preguntó entre vapores el británico míster Trending Topic. «De torturas», le contestaron las Erinias, que aquí juegan un papel majo y no antipático.

Luego de tanto esfuerzo intelectual sobrehumano, se pasó a la conjugación del escurridizo verbo Ser, adornado con bellos zéjeles y discutibles zeugmas. Sin solución de continuidad, pero en Canarias buen tiempo. Think wrong and be right.