Natxo MATXIN
OSASUNA | Octavo partido sin ganar

Hundidos en el pozo de la angustia

Los de José Manuel Mateo no reaccionan y siguen acumulando errores defensivos que les cuestan carísimos. En el Heliodoro Rodríguez el protagonista desafortunado fue Asier Riesgo, cuya titularidad fue correspondida con un fallo en el despeje que provocó el 1-0.

No hay reacción ni se la espera. Osasuna es ahora mismo un equipo plano, hundido, incapaz no solo de ganar a nadie, sino incluso de crearle ciertos problemas al adversario. Además, sigue acumulando errores en defensa que resultan mortales de necesidad. El de Tenerife resultó de los guantes de un Asier Riesgo -sorprendente titular- que no supo despejar un balón sin excesiva dificultad y que acabó en las botas de Diego Ifrán para encauzar una nueva derrota rojilla.

Porque a los de José Manuel Mateo superar el hecho de ponerse por detrás en el marcador les supone todo un mundo. El once osasunista es incapaz de enlazar una jugada, mucho menos llegar con cierto peligro al otro área y resulta ya casi impensable ver un lance en el que el portero rival tenga que esforzarse. La escuadra navarra vio portería solo en una ocasión durante toda la segunda parte y fue... en el penalti que transformó Nekounam casi cuando se llegaba al descuento.

Lo cierto es que Osasuna no está en descenso a estas alturas de campeonato porque los cuatro equipos que ocupan los puestos de la quema no pudieron sumar una victoria, pero eso no va a ocurrir siempre. Nada ha surtido efecto desde el relevo en el banquillo, ni los cambios de esquema, ni el supuesto cambio de actitud hacia una más intensa, ni la entrada de nuevos futbolistas.

En el Heliodoro Rodríguez volvió a verse un bloque insulso, algo más compacto si se admite la licencia, pero sin chispa ni confianza como para elaborar algo de juego, y eso que la coyuntura climatológica del encuentro -llovió torrencialmente durante muchos minutos- incluso favoreció a los navarros. Solo en la primera media hora de juego se vio un equipo con intenciones de pugnarle los tres puntos al Tenerife.

El que perdona...

En ese intervalo de tiempo, tanto David García como Mikel Merino tuvieron en sus botas sendas ocasiones para adelantar a Osasuna en el electrónico, el central después de enganchar con la zurda una falta y el ayer media punta al concluir el mejor y prácticamente único lance en el que Cedrick superó a su par y pudo dar una asistencia con cierto criterio. Todo se vino abajo con el 1-0 para un grupo que tiene la confianza como la mantequilla.

A partir de ahí, al Tenerife le bastó con guardar el sitio y dedicarse a contragolpear, ya que los rojillos apenas les inquietaron en los dominios chicharreros. Mateo quemó todas las naves a la búsqueda de la igualada, pero la retirada de los laterales solo llevó a encajar el segundo gol. Luego llegó el penalti, pero ya no hubo tiempo para más.

Oier regresó a la titularidad siete meses después

Además de la ya mencionada sorprendente titularidad de Asier Riesgo -el guardameta debarra jugó la segunda mitad frente al Alcorcón por problemas estomacales de Santamaría, pero este recuperó su puesto ante el Alavés-, la otra gran novedad del once rojillo fue la presencia de Oier en el lateral zurdo.

Después de siete meses lesionado por una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha en el primer encuentro liguero contra el Barcelona B, el futbolista lizartarra volvió a vestirse de corto para disputar un partido oficial. Oier estuvo por espacio de una hora sobre el Heliodoro Rodríguez, la primera parte desenvolviéndose en el costado zurdo de la zaga, mientras que el primer cuarto de hora del segundo tiempo lo hizo por la parte derecha.

Al polivalente jugador le tocó medirse con una de las más feas parejas de baile, el capitán rival, Suso Santana, que le creó un buen número de problemas por su velocidad y calidad técnica. Además de por su inactividad, que se dejó notar en el noto físico a medida que avanzó el envite, José Manuel Mateo lo reemplazó por Berenguer buscando más profundidad en el ataque navarro y debido a que Oier ya había visto una amarilla a la media hora de juego.

Junto al regreso de uno de los capitanes del equipo, al que se le ha echado en falta en los momentos malos, también se espera en breve el regreso de Lotiés a los terrenos de juego después de que se lesionase en el talón de Aquiles en septiembre.

N.M.