Dirigentes del sindicato, encabezados por su secretario general, Adolfo Muñoz, han analizado en Bilbo la situación generada a partir del 7 de julio y han denunciado que son ya muchas las empresas que están notificando a sus trabajadores que sus convenios no están vigentes.

También han instado al Gobierno de Lakua a adoptar medidas en contra de la patronal y en favor de los trabajadores.

‘Txiki’ Muñoz ha insistido en abogar por la organización de los trabajadores porque, según ha argumentado, «lo que viene es muy fuerte» -a su juicio, una caída salarial «brutal»- en un contexto en el que la patronal «va a por todas» y con la que «el acuerdo posible» hace referencia a bajada de salarios y aplicación de la reforma laboral. Ese acuerdo, ha dicho, «no interesa» a ELA.

A su juicio, «no se da ninguna condición para obtener un acuerdo mínimamente equilibrado con una patronal que obtiene todo del Gobierno» y que lo seguirá haciendo «porque en Madrid se está trabajando otra reforma laboral», ha advertido.

El dirigente sindical ha reprochado que la patronal Confebask diga que los sindicatos no aceptan las reglas de juego cuando éstas están establecidas por «un árbitro comprado -en alusión al Gobierno-, que trabaja para ellos y las cambia» cada poco.

«No hay reglas de juego» ha concluido Muñoz, ya que los empresarios «tocan la aldaba» y «es cuestión de tiempo» de que se apruebe otra reforma.

El responsable de ELA ha advertido de que cuando Confebask habla de «una nueva era, seguro que su intención es que el sindicalismo sea irrelevante».

El sindicalista, que ha considerado que gobiernos y patronal «van de la mano en el objetivo de la caída salarial», ha abogado por «sumar» con quienes estén dispuestos a «pelear» para hacer convenios de empresa como mejor vía para frenar la reforma laboral.

Crítica a Lakua

Muñoz ha sido muy crítico con el Gobierno de Lakua al considerar que «pretende parecer» que trata de evitar una caída salarial en el sector privado cuando Confebask «pone como ejemplo» lo que los gobiernos hacen el sector público, con los recortes que aplican.

Ha aclarado que la ausencia de ELA no ha sido un obstáculo para que Confebask y los sindicatos CCOO, LAB y UGT pudieran haber alcanzado un acuerdo interprofesional en materia de negociación colectiva, pero ha cuestionado que la patronal haya pretendido este acuerdo mientras mantenía el «bloqueo» de las negociaciones de los convenios sectoriales.

También ha reprochado que los sindicatos que han confiado en ese acuerdo no hayan querido decir «la verdad» en relación a lo que supone la reforma laboral de «devaluación de los convenios sectoriales -da prevalencia a los de empresa-».