
Según ha comentado Erkoreka, el Ejecutivo español les había indicado en principio que el día 8 llegaría a Madrid un primer contingente de unas cincuenta personas y que de este grupo una decena viajarían a Bilbo y Donostia. Sin embargo, el Departamento de Políticas Sociales ha matizado después que finalmente serán solo tres los refugiados, de origen eritreo y que serán alojados en Bilbo.
Estas personas vienen desde la isla italiana de Lampedusa de la mano de las organizaciones de ayuda humanitaria Cruz Roja y Acnur. El portavoz de Lakua ha indicado que se cubrirán todas sus necesidades en los ámbitos de alojamiento, manutención y necesidades básicas, sanidad, educación, y asistencia jurídica. «Ya lo hemos dicho en otras ocasiones, el objetivo es que las personas refugiadas se integren en la sociedad vasca con completa normalidad», ha añadido.
«La sociedad vasca es solidaria, ha hecho una apuesta clara por favorecer la integración de estas personas por compromiso con los tratados internacionales y por compromiso con la historia de Euskadi, que en el pasado tuvo que enviar a otros países a personas que huían de situación conflictivas», ha recordado.

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