«Estamos en un socavón», ha admitido Jaume Ponsarnau respecto de la mala racha de Surne Bilbao Basket en la Liga ACB, que tras caer en Zaragoza el sábado pasado, suma ya tres derrotas consecutivas, en vísperas de recibir el domingo que viene a un todavía invicto Real Madrid en Miribilla.

Y para salir de ese socavón, nada mejor que endulzarse las amarguras ligueras con victorias en la FIBA Eurocup que por ahora presenta a los hombres de negro con victorias en sus tres primeros partidos. Y no solo sino, sino que derrotar al Anwill Wloclawek polaco –el vigente campeón– este miércoles a partir de las 20.00 le abrirá las puertas de los octavos de final a falta de los dos últimos partidos en las pistas del Sibiu rumano y del Caledonia escocés.

«Después de lo mal que lo hicimos en Zaragoza, especialmente los últimos 15 minutos, si eres responsable le tienes que dar vuelta para aprender», ha admitido Jaume Posarnau este martes, con la doble mirada en el duelo del miércoles, pero a su vez recordando la renta favorable de 17 puntos de la que dispusieron frente a Basket Zaragoza y el parcial de 38-8 encajado en ese tramo final que derivó en el 77-63 final.

«Se vio que tenemos jugadores que no están en un buen momento de sensaciones y de confianza y hay que recuperar a la gente a nivel mental», ha indicado el técnico catalán antes de recalcar que para tratar de salir de este bache necesitan «más que nunca» el respaldo de sus aficionados.

«No estamos a nuestro cien por cien a nivel de sensaciones y sin duda quien más sabe reforzar esa confianza es Miribilla. Para nosotros es muy positivo jugar en casa. Ahora hay un bache, pero para hacer la mejor temporada de nuestra vida necesitamos tener baches y saltarlos», ha reflexionado.

Por ese motivo, Ponsarnau ha otorgado «mucha importancia» a este partido frente al Anwil Wloclawek tanto «en lo anímico» como en lo deportivo.

«Jugamos contra un equipo que juega mejor que nosotros, rebotea y tira de tres mejor que nosotros, es más físico y tiene más fuerza. El rival es muy bueno. El reto es mayúsculo y ganar sería un paso muy importante. Hay mucho premio y tenemos la oportunidad de aprovecharlo», ha expuesto el preparador de Tárrega.

No hay que olvidar que el triunfo por 79-83 frente a Anwill Wloclawek tuvo mucho de dramático, ya que llegó la remontada bilbaina tras un triple de Adam Smith a menos de tres segundos para el final.

Fue, de hecho, un choque dominado muchos minutos por el cuadro centroeuropeo, que llegó a contar con 12 puntos de ventaja (56-44) antes de un letal 0-14 que cambio la dinámica con Alex Renfroe (22 puntos, 7 rebotes y 29 de valoración) y Sacha Killeya-Jones (18 puntos) como estiletes de los visitantes.

Los mejores jugadores polacos fueron el alero Jacub Garbacz (16, 5 y 16), con importantes triples en el tramo final, y el ala-pívot estadounidense Luke Petrasek (11, 7, 2 tapones y 14).

«En Polonia demostraron su potencial, que es enorme, aunque no fueron consistentes cuando nuestra defensa y la inspiración de nuestros jugadores entró en juego. Y en Escocia tuvieron un día muy malo. Vienen de descansar el fin de semana y han preparado bien el partido», ha advertido Jaume Ponsarnau.

La lealtad de los aficionados de Miribilla

En otro orden de cosas, el portal Palco23 titula que «La Liga ACB bate récord de asistencia en octubre, con una media del 84,9% del aforo», con hasta once encuentros han registrado una asistencia superior al 90% de la capacidad del pabellón, rozando el sold out.

El arranque del curso 2023/24 ha pulverizado los registros de las siete jornadas de la temporada anterior. En la campaña 2022/23, entre la primera y la séptima jornada, la asistencia media se elevó hasta el 68,1%, lo que se traduce en casi 11% menos que en el mismo periodo de la temporada regular actual.

Esta noticia destaca al Bilbao Arena, ya que, según reza el portal, «el equipo que mayor congregación de aficionados agregados tuvo en su pabellón en octubre fue Surne Bilbao Basket, con 23.403 aficionados que siguieron en Bilbao Arena».