El PSE está celebrando este fin de semana su décimo Congreso en el Kursaal de Donostia. Después de las mesas redondas e intervenciones de ayer, donde, entre otros, participó el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, hoy a la mañana han intervenido el actual presidente y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y Eneko Andueza, que será reelegido como secretario general del PSE.

Fiel a su estilo, Andueza se ha mostrado exultante. En su discurso, íntegramente en castellano salvo un pequeño corte y el «egun on» inicial y «eskerrik asko» final, Andueza ha reivindicado el PSE como «el partido que va a liderar el futuro de Euskadi». Ante 337 delegados, ha recordado que «han pasado tres años desde que diéramos un nuevo comienzo al PSE-EE». Después de poner en valor que haya sido «un relevo ordenado», ha reconocido que han sido tres años «duros e intensos, muy intensos», pero que, a su entender, han dado mucho de sí: «PSE es a día de hoy el eje sobre el que pivote el progreso, los avances sociales, la estabilidad y la política». Es más, con el empuje de «un partido cada vez más fuerte y más unido», ha defendido que «podemos decir que hemos cambiado el guion de este país y que somos quienes decidimos el futuro de Euskadi».

PSE, «un partido ganador»

Prueba de ello, Andueza ha aducido que el PSE «no deja de crecer». «El PSE-EE es un partido ganador», ha reiterado dos veces, «un partido que ganó con contundencia las últimas elecciones generales en Euskadi», refiriéndose a las elecciones al Congreso y al Senado del Estado español.

Además, ha subrayado que es «un partido con más poder municipal y foral, gracias a unos excelentes resultados que han hecho posible que hoy tengamos más responsabilidad en los gobiernos forales y, sobre todo, que tengamos muchos más concejales y concejalas en muchos pueblos». Ha puesto el ejemplo de Irun, Eibar, Lasarte, Ermua, Zumarraga, Portugalete, Gasteiz y otros, a pesar de que en las últimas elecciones municipales el PSE perdió 19 concejales y más de 20.000 votos en total.

También ha destacado que el PSE tiene «mucha más responsabilidad» en Lakua: «No ha venido del cielo, ha venido emanada de las urnas, de la expresión popular que ha querido que el socialismo vasco tenga mucha más fuerza, y por eso tuvimos un resultado extraordinario», ha afirmado, con la subida de algo menos de un punto porcentual y dos escaños.

Según ha explicado Andueza, partiendo de esos resultados, decidieron «ser valientes», «poner el país por delante de intereses de partido». Para ello, en sus palabras, «supimos negociar bien y fuimos exigentes con el socio», y eso se traduce en que han pasado de 4 a 5 consejerías, y que han dado «un salto cualitativo» en cuanto al peso de los mismos, gestionando las carteras de Economía, Trabajo, Empleo, Vivienda, Justicia y Memoria Democrática, entre otros.

Por lo tanto, para Andueza el balance es sumamente positivo: «Hoy podría haberos traído muchos números, números de votos, porcentajes... Yo soy muy de letras, yo prefiero las sensaciones a los números. Y la sensación que tengo, honestamente, es que estamos haciendo un extraordinario proyecto de país».

«El país por delante»

En su intervención, Eneko Andueza ha resaltado que el PSE es «el verdadero, el auténtico y el único dique de contención contra el fanatismo, contra la derecha y contra la ultraderecha, garantía en la defensa de los principios democráticos y de los valores de la paz, de la libertad y del progreso en este país».

Con ese objetivo, ha reiterado que el PSE «cierra la puerta a que nadie quiera emprender ningún tipo de aventuras y sitúa a la política vasca en términos de racionalidad». Ha puesto como ejemplo su participación en la Ley de Educación. «No somos el partido ni de las identidades, ni de las banderas», ha apostillado, siempre con miras a «ese proyecto común que se llama PSOE y se llama España». En ese sentido, ha situado al PSE como «un pilar para el socialismo español», celebrando que tienen más representación dentro de los órganos de dirección del PSOE.

Para concluir, Andueza ha hecho un llamamiento a dejar de lado los intereses corporativos y personales: «Lo primero es pensar qué es lo mejor para el país, luego qué es lo mejor para el partido, y lo último qué es lo mejor para cada uno de nosotros y nosotras». Asimismo, ha querido mandar un aviso a sus compañeros y compañeras: «este partido no es un modo de vida, este partido es un modo de entenderla, en la que entregamos nuestra vida para mejorar la de los demás. Un partido al que se viene a trabajar. El que haya venido pensando otra cosa, creo que se ha equivocado de puerta». En sus palabras, la política es una «tarea colectiva» y para llegar a puerto es necesario el empuje de toda «la tripulación».