
El nuevo jugador del Baskonia Rodions Kurucs ha considerado este miércoles en su rueda de prensa de presentación que el Baskonia encaja con él por su estilo y su carácter, y ha desvelado que a pesar de haber despertado mucho interés por parte de otros equipos, el conjunto alavés fue el primero que le presentó una oferta en firme.
El jugador letón llega procedente del UCAM Murcia con un contrato de tres temporadas (firma hasta 2028) y lucirá el número 7. Se ha mostrado ambicioso, con ganas de «mejorar los resultados del año pasado para llegar a la Copa del Rey y ganar títulos».
El azulgrana todavía no puede entrenar con sus compañeros, ya que fue intervenido de una lesión en su fascia plantar que le apartó del Eurobasket. No se dieron los plazos de recuperación, pero todo apunta a que será complicado que llegue al comienzo del campeonato.
«Trabajamos mucho con los preparadores, he empezado a correr y el doctor dice que vamos muy bien, en los planes previstos», ha explicado el jugador, que tal y como confirmó el director deportivo Félix Fernández, arrastraba molestias desde su época en Murcia. El letón ha admitido que sufre viendo entrenar a sus compañeros después de acumular cuatro años sin lesiones, pero confía en llegar «preparado para ayudar al equipo».
Respecto a la temporada, ha indicado que está «maduro» y aunque ha reconocido que las dificultades estarán en que habrá más partidos con un calendario diferente, debido a su pasado en la NBA, ha remarcado que si llevan a cabo «un buen trabajo de recuperación, todo irá bien». «Estoy preparado para este calendario y también físicamente», ha añadido.
El hermano de Rodions Kurucs, Arturs, estuvo ocho años en el Baskonia y se formó en Gasteiz, por eso el letón tendrá una adaptación más sencilla. «Mi hermano me dijo que es un club ambicioso y con presión y eso me gusta porque quiero ganar», ha explicado. «La familia de su mujer es de aquí y me puede ayudar», ha revelado. «Arturs ha estado aquí muchos años y le encanta verme con la camiseta del Baskonia», ha confesado sobre su hermano.
Otra de las incógnitas será su rol y el papel que desempeñe junto a Tadas Sedekerskis, un jugador muy similar a Kurucs. «En el sistema de Paolo Galbiati corremos mucho y no hay posiciones definidas. Me gusta jugar más de 3 y puedo jugar con Sedekerskis porque podremos intercambiar posiciones», ha aclarado.
Al margen del basket, el nuevo baskonista se declaró culpable por agredir a su pareja en 2019, por lo que tuvo que someterse a un programa para perpetradores de violencia machista. Acerca de esto no ha dado muchos detalles y ha preferido hacerlo después de la rueda de prensa, sin micrófonos. «He madurado muchísimo después de esta situación. He crecido mucho como persona y estoy aquí para trabajar y ayudar al club», ha recalcado.

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