«El libro eterniza a Sonia, pero también sirve como herramienta para combatir el miedo»
Mamadú Nfamara ha cumplido el último deseo de su mujer Sonia Cámara (@mamaderizos) publicando el libro ‘Te encontré en Bisáu’, una obra que recopila la historia de amor de la pareja y relata su lucha contra el cáncer.

Mamadú Nfamara, coautor de ‘Te encontré en Bisáu’, ha cumplido el último deseo de Sonia Cámara (@mamaderizos) publicando recientemente el libro que ella estaba escribiendo antes de morir. En él se relata la historia de su relación, desde el momento en el que la pareja se conoció en Guinea Bissau, en una misión humanitaria de 2018, hasta su despedida el pasado junio.
El libro recopila a su vez las reflexiones, preocupaciones y sueños de la autora, que compartió con sus más de 187.000 seguidores de Instagram su experiencia en una relación interracial, en la maternidad y en la lucha contra el cáncer. Su compañero de vida, Mamadú Nfamara, ha querido «eternizar» la memoria de Sonia con la publicación de esta obra. Aunque reconoce que terminar el libro ha sido muy duro, afirma que no se arrepiente de haberlo hecho, para que los hijos que ambos tuvieron cuenten con un recuerdo físico al que puedan recurrir cuando sean más mayores.
Nfamara también ha visto el libro como una herramienta para combatir el miedo y el racismo, ya que opina que es consecuencia del desconocimiento e impide a las personas avanzar y disfrutar de las diferentes experiencias de la vida. También espera que pueda servir de ayuda a cualquiera que pueda verse en una situación similar a la suya, haciéndolo sentirse acompañado.
¿Cómo resumiría lo que se narra en el libro?
Creo de verdad que el libro tiene muchas cosas. Yo lo resumo como una biblia de Sonia, donde podemos eternizar a Sonia, porque es donde está toda su vida, toda su experiencia, tanto a nivel laboral como personal.
¿A qué tipo de lector se lo recomendaría?
Cuando hablamos de literatura, mucha gente está en su zona de confort, pero este es un libro que puede leer cualquier persona. Incluso los que no son amantes de libros románticos pueden leerlo, porque no pertenece solo al género de romance. Yo diría que cualquier persona a la que le guste leer puede disfrutar este libro.
¿Cuál es el mensaje que quería transmitir al lector mediante este libro?
Pues que tenemos que ser más humanos y no perder nuestra esencia. Somos humanos, estamos hechos para vivir y descubrir. Salimos de nuestras zonas de confort y trazamos nuevos objetivos.
¿Qué tipo de cosas podría aportar en la sociedad actual?
Puede servir como una herramienta para afrontar nuestro miedo y nuestra diferencia. Si tú no tienes ningún referente que haya vivido una cosa así, no sabes cómo afrontarlo. Cuando tenemos miedo, no vamos a dar este paso. Entonces, tu miedo te limita al impedirte dar un paso adelante.
«[Sonia y yo] Hemos contado todo, y cuando digo todo es todo, tanto lo bueno como lo malo»
¿Qué les animó a publicar el libro?
Yo aprendí a compartir gracias a Sonia. Empezó en su maternidad con el blog, luego pasó a Instagram y cuando Planeta le dijo que nuestra historia podía ser buena, empezó con el proyecto del libro. Hemos contado todo. Cuando digo todo es todo, tanto lo bueno como lo malo.
Hablando de su recorrido como influencer, ¿tiene intención de conservar la cuenta de Instagram de Sonia activa?
Sigo compartiendo resumidamente la semana de los niños porque siento que esa gente ha sido parte de nuestra familia. De hecho, en los momentos más difíciles estaban ellos ahí compartiendo consejos con Sonia y apoyándola. También le mandaban mensajes de ánimo y si los lees sabes que salieron del corazón. Entonces, quiero que los seguidores sean parte de esta decisión. Que ellos decidan si debería cerrarla o no.
¿Qué es lo que más difícil se le hizo en el proceso de terminar este libro?
Mi duelo ha sido diferente en todos los sentidos. Estoy fuera de casa, llevo solo 6 años aquí y la única persona que tenía para compartir mi vivencia era Sonia. Terminar el libro es un factor que también ha influido en mi forma de vivir este duelo. Contar lo que he compartido con Sonia significa hacer memoria y revivir cada pequeño detalle que hemos vivido. Ha sido muy duro, pero también es una forma de encontrar y valorar la oportunidad que tengo yo de seguir acompañando a estos niños que Sonia no tiene.
¿Se ha llevado algún aprendizaje durante el proceso de publicación?
Ella me pidió que terminara el libro, es una de las promesas que le hice a Sonia en los últimos momentos de su vida, pero también ha significado mucho para mí. Ha sido una oportunidad de encontrarme a mí mismo. Una experiencia que me ha permitido crecer no solo a nivel emocional, sino también a nivel personal.

¿Diría que le ha servido para interiorizar mejor lo sucedido?
Me ha servido para interiorizarlo y también para ver de dónde salimos y dónde estoy ahora. Recordar lo que hemos vivido me ha servido para valorar la vida y para ver que merece la pena vivir cada segundo. Sonia no tiene oportunidad de acompañar a estos niños y yo sí la tengo. No hay que desperdiciarlo y hay que seguir haciendo el proyecto de vida que hemos comenzado. Hay que seguir adelante.
¿Tiene pensado leerle el libro a sus hijos en algún momento? ¿Tenerlo como una especie de memoria?
Cada uno de mis hijos va a tener su caja con este libro y con muchas otras cosas con las que ellos puedan recordar a su madre. Con objetos personales y con fotos que tienen mucha más explicación que la que puedo darles yo. Todavía son pequeños, pero en un futuro será como una sesión de cine, nos sentaremos a leer el libro y les explicaré lo que quieran saber.
¿Cuál es su capítulo favorito?
‘Déjame ir’. Diría que es el más duro, pero es mi favorito.
¿Cómo ha sido tu experiencia viviendo en Nafarroa? ¿Qué diferencias hay respecto a Bisáu?
Llevo casi 7 años viviendo en Zizur. Es vivir otra vida, ser otra persona. Mi propósito del viaje, lo que motivó a afrontar el cambio, fue vivir el amor. Vine por una cosa en concreto, vivir lo que siento y crear mi familia. Lo he sentido como un antes y un después.
¿Cuál diría que es el mayor choque cultural?
La forma en la que la gente habla de comida. En mi cultura no se habla de comida, por la situación en la que está la sociedad. Tú puedes tener comida y no sabes si el otro tiene o no. No puedes estar hablando de comida o no se debe hablar de comida sin saber la situación de la otra persona.
¿Diría que han sido bien acogidos y que forman parte de la comunidad?
Sí, sin duda. Tengo relación con los padres de Sonia, que nos apoyan mucho, y Zizur es un pueblo que me ha acogido muy bien. Fue algo de lo que me di cuenta durante el duelo. Tengo muy buena relación con los padres de la escuela y con los vecinos. Me siento muy agradecido y muy arropado.

El Patronato del Guggenheim abandona finalmente el proyecto de Urdaibai

Descubren un colosal «valle de los dinosaurios» en el Stelvio con miles de huellas fósiles

Zestoa: El fiscal admite la sombra de violencia machista pero mantiene la petición de multas

85 urte dituen Juaristi enpresaren egoera larriaz ohartarazi dute berriz langileek

