Idoia Eraso

Pase sanitario en Ipar Euskal Herria para ir al bar, al hospital o coger el avión

Desde este lunes es necesario el pase sanitario también en la hostelería, centros de salud y algunos transportes públicos de todo el Estado francés, hasta el 15 de noviembre por lo menos. Esta medida está siendo criticada, y se han organizado concentraciones en Baiona, Kanbo y Donibane Garazi.

Es necesario el pase sanitario para entrar en locales de hostelería. (Guillaume FAUVEAU)
Es necesario el pase sanitario para entrar en locales de hostelería. (Guillaume FAUVEAU)

Las nuevas medidas contra el covid-19 dejan una nueva realidad este lunes en Ipar Euskal Herria, con la implantación del pase sanitario en nuevos espacios públicos, como la hostelería, los centros de salud y algunos transportes públicos. Esto también está teniendo otras consecuencias paralelas, ya que se han multiplicado las colas en las farmacias que realizan test de antígenos sin cita. Y este lunes tarde están organizadas varias concentraciones contra el pase a las 19:00, en Donibane Garazi, Kanbo y Baiona.

El pase ya era obligatorio en las salas de cultura y deporte de más de 50 personas desde el 21 de julio, pero desde este lunes no habrá límite de capacidad. Será necesario también en toda la hostelería –incluso en terraza– y en los transportes públicos en trayectos de larga distancia, como en aviones, autobuses o trenes internacionales o TGV.

Habrá que presentar el pase también para entrar en hospitales y residencias. Y será necesario en los centros comerciales de más de 20.000 m2, pero en Ipar Euskal Herria no hay prohibiciones en ese sentido.

El pase es un certificado con un código QR que muestra que se han recibido las dos dosis de la vacuna del covid-19, un test positivo de más de 11 días y menos de seis meses o un test de antígenos o PCR negativo. Ha aumentado el número de horas de validez del test negativo, que pasa de 48 a 72 horas.

Concentraciones

Estas últimas semanas se han multiplicado las protestas contra la imposición del pase sanitario. En este día en el que se extiende su uso, se han organizado concentraciones en diferentes lugares de Ipar Euskal Herria. Serán en Baiona, Kanbo y Donibane Garazi a las 19:00 bajo el lema ‘No al pase sanitario’.

Los organizadores de la protesta denuncian que con esta nueva medida se amplía la gestión policial de la pandemia, y que «el control social y la represión se extienden». Explican que «con esta medida el Estado tiene la capacidad técnica de saber dónde, cuándo y con quién estamos, gracias a los datos recogidos a través del escáner del código QR».

También ponen en evidencia la carga que se les impone a los empleados de hostelería, de los medios de transporte o de centros de salud, dado que «estarán obligados a hacer de policías, porque serán ellos lo que deberán de controlar el pase».
 
Las acciones de protesta contra el pase sanitario han ocupado las calles de Ipar Euskal Herria durante las cuatro últimas semanas. Este pasado sábado se reunieron miles de personas en Baiona, y también hubo una concentración en Hendaia. También hubo protestas a través de todo el Estado que reunieron a miles de personas.

Colas para hacerse los tests

Las colas para hacerse los test han aumentado considerablemente desde que se impuso el pase sanitario, pero desde este lunes han tomado nuevas dimensiones. Es especialmente visible en la parte más costera de Lapurdi, ya que, al tratarse de una zona turística, hay que sumarle el notable aumento de la población en esta primera quincena de agosto.

Tanto los test de antígenos como los PCR son gratuitos con la tarjeta de la Seguridad Social, pero en esta nueva situación el acceso a ellos está siendo más dificultoso.

Como dato ilustrativo, en la farmacia que se encuentra en el centro comercial Leclerc de Urruña este lunes por la mañana había cerca de 100 personas esperando para hacerse el test de antígenos.

 

En estos momentos los lugares para realizarse los test son numerosos, especialmente los de antígenos que se pueden hacer en farmacias, en gabinetes de profesionales de salud privados, como médicos, enfermeras, fisioterapeutas… Las pasadas semanas algunos profesionales no han podido realizar los tests porque no había suficientes en las farmacias.