La Sala Segunda del Tribunal Supremo se ha mostrado de acuerdo con el criterio de la Fiscalía y ha resuelto en favor de la Audiencia Nacional la cuestión de competencia que le había planteado el Juzgado de Instrucción número 4 de Iruñea por los incidentes del pasado 11 de marzo para que determinara si la causa se debía juzgar en Nafarroa o en el tribunal especial español, que también asumió la competencia al entender que los hechos se enmarcaban en un delito de «terrorismo».

El Supremo considera que los incidentes de Alde Zaharra se habrían ejecutado «mediante conductas concertadas dirigidas a crear un estado de terror e inseguridad ciudadana, por lo que al menos de forma indiciaria» podrían ser «perfectamente subsumidos en el delito de terrorismo del artículo 573 del Código Penal», en concurso con presuntos delitos de lesiones, daños, desórdenes públicos, incendio y atentado.

Tres jóvenes de Errenteria permanecen encarcelados por esos hechos. Al respecto, el Alto Tribunal asevera que los tres presos concurrieron al lugar donde habría de celebrarse la manifestación, en el transcurso de la cual llevaron actuaron «en consonancia y colaboración con otra parte de los manifestantes, con los que compartieron consignas, modos de actuación y medios utilizados para crear el clima de terror que allí se produjo», por lo que «es obvio el concierto y la comunicabilidad de las acciones desplegadas por cada uno de ellos». Un menor que también fue detenido quedó en libertad.