IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Compromiso

Si hace algunas entregas incidíamos en la necesidad de apoyar las propuestas culturales locales y emergentes como condición indispensable de una sociedad saludable, hoy retomamos de nuevo aquellos reclamos y centramos nuestra atención en el papel de los centros culturales. Más allá de las dudosas cuotas de compromiso que adquieren los grandes museos como el Guggenheim de Bilbo, definido por Iñaki Esteban como «ornamento» en su “Efecto Guggenheim” (Anagrama 2007), o aquellos otros centros que solo se acordaron del tejido local cuando la crisis económica minó las opciones de contar con grandes nombres del arte contemporáneo, debemos aplaudir y subrayar los programas que trabajan en la creación de espacios que permiten el crecimiento de artistas jóvenes cuyo talento necesita ser cuidado y potenciado, puesto que son el futuro de la cultura de nuestro país y no hay sociedad que se pueda construir sin ella.

En este sentido, el Koldo Mitxelena Kulturenea de Donostia inauguró el pasado 3 de marzo la muestra perteneciente al “Programa de Artistas Noveles de Guipuzkoa”. Comisariada por la joven pero experimentada Leyre Goikoetxea, un elenco formado por Mikel R. Nieto, Ane Meoki, Iván Gómez, Julen García Muela, Elisabeth Dominguez Ran, Nadia Barkate, Izaskun Álvarez Gainza y Xare Alvarez Berakoetxea plantea una exposición en la que ocho artistas muestran sus proyectos hasta el 30 de abril.

Particular interés suscita la puesta en escena, en la que, a pesar del carácter colectivo del proyecto, cada espacio actúa como una pequeña exposición individual y permite una interesante convivencia entre las diferentes producciones. Varias disciplinas se dan cita en un programa que, además de la faceta expositiva, cuenta con una serie de actividades complementarias de las que destacamos el taller “Zergatik hitza-Por qué la palabra”, que impartirán Haizea Barcenilla y Zuhar Iruretagoiena, quienes, además, actuaron como jurado de la presente edición. Durante dos días, plantearán la relación entre la palabra y la imagen en las formas de presentación del trabajo artístico.

Destacamos en estas líneas el trabajo de Iván Gómez (Irún, 1984). El proyecto presentado para la exposición en el Koldo Mitxelena Kulturenea se desarrollará de forma simultánea en BilbaoArte hasta el 31 de este mes. Esta original forma expositiva, en la que Gómez vincula dos centros de diferentes ciudades bajo una misma propuesta, incide en la introducción de la página, ya que la oportunidad de esta participación en Bilbo es consecuencia de haber sido seleccionado como becado del centro el pasado 2015. “Roma y Remoria” alude a la ciudad que Remo podría haber construido si Rómulo no se hubiera encargado de crear Roma. Esta ficción nos ayuda a introducirnos en una serie de reflexiones sobre la formación de relatos a través de la historia, así como el papel que las formas de construcción de los mismos adquieren en el imaginario colectivo.

En este doble proyecto (que, a su vez, es uno solo), Gómez introduce una serie de piezas que abarcan desde performance, instalación o vídeo monocanal. La identidad cultural se establece sobre las narraciones que la sustentan y todo relato es un compendio de elementos que interactúan para crear otros nuevos y diferentes. En esta ocasión, el artista plantea cuestiones que, desde un doble juego como creador y receptor de discurso, utiliza el dispositivo del arte para cuestionar y repensar los orígenes y destinos de nuestras construcciones culturales.