El ciclo «Escuchar para mejorar» ha sido abierto hoy en Iruñea por Arnaldo Otegi con un acto que ha llenado toda la parte inferior y la cancha del Labrit, además de parte del primer piso. Le seguirán otras reuniones similares en el resto de herrialdes. Durante hora y media, ha respondido a preguntas sobre cómo ve el futuro del país, las próximas elecciones, el bloqueo en torno a las consecuencias del conflicto... Entre los encargados de formularlas, una pensionista, un vecino de Corella, una inmigrante y feminista, la madre de un preso, una de las 52 personas que han logrado acuerdos en juicios políticos, una joven escéptica ante las elecciones...

En las respuestas de Otegi ha habido hilos conductores como reivindicar los logros obtenidos, que lamenta que a veces pasan desapercibidos. Entre ellos lógicamente «haber puesto patas arriba el régimen» en Nafarroa, pero también los acuerdos judiciales: «¿Qué han ganado ellos ahí? ¿Un papel? Yo estoy muy contento de que la gente no vaya a la cárcel, porque todos somos necesarios para poner en marcha el proceso independentista. Lo que nunca firmaremos al Estado es que no vamos a luchar, eso nunca».

En la misma línea, ha prometido batalla en las próximas elecciones estatales, reiterando que el voto a EH Bildu «vale doble» porque servirá para «echar al fascismo» si hubiera una remota oportunidad de democratización en el Estado y a la vez para reforzar al independentismo vasco si toca seguir ese camino de modo unilateral.

Otegi ha dicho soñar con que los votos de los abertzales de izquierda puedan llegar a ser decisivos para decidir La Moncloa y ha incidido en las posibilidades abiertas de llevar a Madrid a Bakartxo Ruiz. Ha recordado para ello que Javier Esparza (UPN) lo que remarcó la noche electoral no era la irrupción de Podemos sino el hecho de que en Nafarroa no hubiera un solo diputado abertzale. «¿A que no sacamos un diputado en Madrid esta vez?», ha preguntado al auditorio en tono de reto. A continuación Bakartxo Ruiz, candidata, ha exhortado a «jugar este partido» con el viejo lema «Ezina, ekinez, egina». Y a quienes crean que está difícil, les ha recordado que lo mismo se pensaba de la posibilidad de derrocar al régimen.

Aplaudido con mucho cariño en su retorno a Iruñea tras los años de prisión, Otegi ha concluido marcando los retos próximos: construir una hoja de ruta escuchando a la gente, lanzar un «segundo frente» independentista junto al catalán, «sacar a los presos» y avanzar en las elecciones con hitos posibles como llevar a Bakartxo Ruiz al Congreso.

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— GARA Iñaki Soto (@gara_isoto) 2016(e)ko maiatzak 21