Agustín GOIKOETXEA
BILBO

El PNV beneficia a las constructoras y endeuda a Bizkaia hasta 2035

El diputado general José Luis Bilbao vuelve a ser interpelado hoy en Gernika sobre la deuda de 2.207 millones de euros que acumulan las arcas forales después de la apuesta del PNV por la construcción de la Supersur. Bizkaia pagará hasta 2025 los 922 millones que ha costado ese vial infrautilizado, del que solo se han beneficiado las constructoras.

El entramado societario del que se ha dotado en los últimos años la Diputación vizcaina dificulta establecer cuál es la deuda real acumulada de la institución foral. En su último informe de fiscalización, el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) la ha fijado en 2.207 millones de euros, precisando que ese endeudamiento creció de 1.500 a 2.200 millones, en el periodo 2009-2011, por los gastos derivados de la construcción de la Variante Sur Metropolitana. Las únicas beneficiadas han sido constructoras como Urazca, con vinculaciones en el pasado con miembros del Ejecutivo foral.

El tercer mandato de José Luis Bilbao al frente de la Diputación ha sido en el que han quedado al descubierto las consecuencias de la política de construcción de infraestructuras en Bizkaia. Destacan, sin duda, el BEC –con una deuda que supera los 300 millones– y la Supersur, con 992 millones de euros. En la última auditoria del TVCP, correspon- diente a 2010, el órgano fiscalizador advierte del «significativo» crecimiento del endeudamiento, fijando su atención en la «fortísima» carga que soportan las sociedades públicas forales, donde la deuda aumentó «casi el 50%».

La palma se la lleva Interbiak, la mercantil a la que la Diputación ha encomendado la construcción y gestión de las últimas infraestructuras viarias. Desde agosto de 2013, afronta el pago de los 922 millones de la Supersur, cuyas previsiones de ingresos por los peajes no se cumplen, lo que no permite ni pagar el mantenimiento.

Las grandes beneficiadas de esa política han sido las empresas que construyeron esa autopista de peaje, donde se encuentran las principales firmas a las que se adjudica la mayoría de la obra pública en la CAV. Una de ellas fue Urazca Construcciones, quien en asociación con otras acometió tres de los tramos de la Supersur por un importe que supera las 158 millones. De esa constructora fue apoderado desde el 27 de marzo al 24 de noviembre de 2003, quien a partir del 1 de julio de ese año fue diputado foral de Hacienda y Finanzas, José María Iruarrizaga.

De marzo a noviembre de 2007, a la UTE de la que formaba esta constructora se le adjudicaron los tramos Peñascal-Larraskitu, Larraskitu-Buia y Ortuella-Portugalete. En el primero y tercero, licitado por 88 y 20 millones, participó con Construcciones Mariezcurrena, Nortunel y Asfaltados Olarra; el segundo, por 49 millones, lo hizo con Asfaltados Olarra y Grupo Mecanotubo.

 

La comparecencia del «caso Iruarrizaga» será el lunes

En la comisión Institucional de las Juntas Generales de Bizkaia comparecerán el lunes, a petición de EH Bildu, el diputado general así como los responsables de Presidencia y Hacienda, al objeto de explicar por qué este último, José María Iruarrizaga Artaraz, se mantuvo varios meses en 2003 como apoderado de varias empresas del grupo constructor Urazca y no fue dado de baja de ese cargo en la firma sociosanitaria Igurco Gestión SL, tal y como ha informado GARA. La coalición estima que se trata de una incompatibilidad manifiesta, por la que se debería abrir un expediente al diputado jeltzale.

En el anterior pleno de la Cámara vizcaina, la mera mención por parte de los junteros de EH Bildu del nombre del miembro más veterano de los gobiernos de José Luis Bilbao y su relación con la empresa privada motivó gestos de reprobación del diputado general y de otros integrantes de su equipo, aunque no llegaron las aclaraciones ni en la sala ni en los pasillos. Será en los últimos compases de la legislatura cuando llegarán las aclaraciones desde el Ejecutivo foral.A.G.