La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, defendió ayer que el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos (TTIP, por sus siglas en inglés) beneficiará no solo a las grandes multinacionales sino también a las pequeñas y medianas empresas (pymes), al acabar con algunas de las barreras que se encuentran para exportar al mercado norteamericano.

«Quien diga que el TTIP es solo para grandes empresas está diciendo tonterías», dijo Malmström durante una rueda de prensa coincidiendo con el inicio en Nueva York de la novena ronda de negociaciones entre la UE y EEUU sobre este tratado que se centrará en acercar posiciones al campo regulatorio.

«Las pymes son la columna vertebral de la economía europea. Estas compañías canalizarán los beneficios del TTIP a sus comunidades locales», añadió la comisaria.

Ante las organizaciones en contra del TTIP que denuncian «una amenza a la democracia, el medio ambiente y los estándares laborales», Malmströn replicó que «no es cierto», y aseguró que «no cambiará nuestro régimen sobre alimentos genéticamente modificados o carne de vacuno hormonada».