Koldo LANDALUZE
DONOSTIA

A. Romero traslada a la pequeña pantalla «Empire of the Dead»

El Festival de Cannes ha servido de escenario para presentar diversas producciones televisivas. Uno de los proyectos que más interés ha generado es la adaptación catódica del cómic «Empire of the Dead» que lleva la firma del maestro del terror George A. Romero.

Considerado como el padre de la iconografía zombie, el veterano cineasta George A. Romero ha creado a lo largo de su filmografía un universo de muertos vivientes que ha servido de inspiración para multitud de autores. “La noche de los muertos vivientes” (1968), “Zombi” (1978) y “El día de los muertos” (1985) conformaron su primera trilogía; veinte años después retomaría la temática con “La tierra de los muertos vivientes” (2005), “El diario de los muertos” y cuatro años después completaría su segunda trilogía con “La resistencia de los muertos”.

Tras no conseguir sacar adelante nuevos proyectos cinematográficos, desarrolló una propuesta destinada al sector de los cómic dentro de la poderosa editorial Marvel –“Empire of the Dead”–, que será trasladada a la pequeña pantalla por la productora Demarest. Este proyecto se ha hecho oficial en el mercado de Cannes y el productor Peter Grunwald ha revelado algunos detalles de esta propuesta en la que participará el propio Romero junto a Sam Englebardt y William D. Johnson.

Por el momento se desconoce si el veterano cineasta neoyorquino se colocará detrás de la cámara para rodar algún episodio de esta nueva ficción. Recordemos que, en su día, rechazó la propuesta de dirigir un episodio de “The Walking Dead” porque consideraba que esta serie no era más que «un culebrón con zombis ocasionales».

Ilustrado por Alex Maleev, “Empire of the Dead” está escenificado en un futuro apocalíptico, en el que la plaga de los zombis se ha convertido en algo normalizado. Manhattan se encuentra en cuarentena y los humanos deben unir sus esfuerzos para combatir esta plaga de no muertos a la que se unirá un nuevo mal, los vampiros que viven plácidamente instalados en las altas esferas del poder.