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BILBO

El CES pide impulsar el apoyo al aumento del tamaño empresarial vasco

El Consejo Económico y Social Vasco (CES) alertó sobre el «reducido» nivel de emprendimiento en la CAV y pidió centrarse en la especialización en campos en los que el territorio es «fuerte» o tiene «potencial».

El Consejo Económico y Social Vasco (CES) presentó ayer el estudio sobre “Dinamismo empresarial, creación de riqueza y empleo: Un análisis comparado desde la Comunidad Autónoma Vasca”, que recoge un análisis empresarial vasco y una comparativa con las regiones europeas de Baden-Württemberg, Flandes y Emilia Romagna, zonas con las que comparte autonomía política y pueden ser considerados como regiones ricas.

El CES instó a impulsar una política integral de apoyo al aumento del tamaño de las empresas vascas y a centrarse en la especialización en campos en los que la CAV es «fuerte» o tiene «potencial». Asimismo, propuso «orientar» de manera eficaz el emprendimiento y poner en marcha foros de participación público-privados.

También ve necesaria una mayor concienciación social en torno a la necesidad de una estructura empresarial «fuerte, saneada y responsable, capaz de crear y mantener niveles de valor añadido y de empleo de calidad». En esta línea, el CES recordó que el análisis comparativo con las regiones europeas evidencia que «la existencia de empresas competitivas, rentables, responsables y generadoras de empleo de calidad» es una condición necesaria para una distribución equilibrada de la riqueza y para garantizar un sistema de protección y cobertura social que haga posible la cohesión social y los derechos sociales de los ciudadanos.

El informe del CES también señala el «reducido» nivel de emprendimiento en la CAV, que su proporción es inferior a la media estatal (4,4% frente a 5%), que «contrasta con su historia» y que, en su mayor parte, responde a una situación de necesidad y no a «valoración de oportunidades».

Considera que el tamaño de las empresas vascas es uno de los objetivos de mejora porque existe una «excesiva atomización» del tejido empresarial vasco que genera «desventajas competitivas».

Por ello, animó a las instancias públicas vascas a orientar el emprendimiento de una manera «más eficaz» y promoverlo en el ámbito educativo, «desde las etapas más tempranas hasta los estudios terciarios», y en la sociedad en general.