Ion SALGADO
GASTEIZ

Maroto deja un agujero de 68 millones

Un informe del interventor y del jefe de la Tesorería del Ayuntamiento de Gasteiz constata que al presupuesto municipal le faltan 68 millones para atender las obligaciones de 2015.

Al presupuesto municipal de Gasteiz –que en 2014 era de 349 millones de euros– le faltan 68 millones para poder atender las obligaciones del presente ejercicio. Así lo constata un informe elaborado por el interventor y por el jefe de la Tesorería del Ayuntamiento, que han contrastado con los responsables técnicos de cada departamento la falta de recursos económicos.

En un comunicado, el Gobierno local de la capital alavesa, en manos del PNV, explicó ayer que los altos funcionarios realizaron el informe en respuesta a un requerimiento del alcalde, Gorka Urtaran, que el 15 de junio pidió un informe-auditoría detallado para conocer en profundidad la situación presupuestaria y de tesorería de la institución.

El documento, que fue remitido ayer a los grupos de la oposición, destaca que el déficit que habría que cubrir para atender las necesidades económicas de este curso asciende a 68 millones de euros. 15,5 millones de euros corresponden a la deuda que arrastra la sociedad pública Ensanche 21, que el pasado mes de febrero anunció una ampliación de capital; y 8,3 millones de euros son fruto de las retenciones de créditos realizadas a diversos departamentos.

Asimimo, el capítulo de obligaciones derivadas de sentencias judiciales asciende a 15,7 millones de euros. 11,2 millones corresponden al principal y 4,5 a los intereses derivados de no haber pagado las sanciones con anterioridad. Cabe recordar que EH Bildu ya denunció el pasado mes de abril que el Ayuntamiento, a través de GILSA, tiene pendiente de pago una factura de 1,65 millones euros relacionada con una expropiación realizada en Jundiz. Una cantidad a la que se deben sumar las perdidas derivadas de las expropiaciones de Olarizu, que superan los 18,7 millones de euros.

El informe financiero publicado ayer también pone de manifiesto la obligación de abonar 2,45 millones de euros derivados del IVA correspondiente a las nuevas oficinas municipales de San Martín; y revela un agujero de 21,65 millones de euros asociado a las partidas de gastos de sociedades y departamentos que no tienen suficiente dotación presupuestaria. Este es el caso de TUVISA, que necesita 7 millones para cerrar el ejercicio. La oposición alertó hace meses de la situación de esta empresa, que la pasada legislatura sufrió los recortes impuestos por el Gabinete de Javier Maroto.

Además, el nuevo Ejecutivo considera que, «por prudencia», hay que sumar los casi 5 millones que supondría el abono del 75% de la paga extraordinaria de diciembre de 2012. Algo que «es muy probable», en vista la resolución del Gobierno español, de obligado cumplimiento.

Recuperar el equilibrio

Tras dar cuenta del informe a los grupos municipales, Urtaran anunció la presentación de un plan para recuperar el equilibrio presupuestario. «Hemos trasladado a los grupos el informe al completo, y les he emplazado a una nueva reunión la próxima semana para presentarles un borrador de un plan económico para sanear las cuentas municipales», explicó.

Peio López de Munain (PSE), denunció que la gestión de Maroto «ha sido nefasta, no solo en lo social, sino también en lo económico». «Es lamentable que quien durante cuatro años se ha vendido como el gurú de las finanzas municipales nos haya dejado un agujero de más de 60 millones de euros. [...] Debería pedir perdón porque ha vuelto a mentir y ha puesto en peligro la prestación de servicios públicos fundamentales», subrayó.

EH Bildu ha convocado hoy una rueda de prensa para valorar el contenido del informe.

Por su parte, lejos de reconocer el error, Maroto sostuvo ayer mismo que gracias su gestión el Ayuntamiento de Gasteiz «ha conseguido pasar de un déficit de 47 millones de euros en 2010 a un superavit de 2,3 millones de euros al finalizar 2014, según los datos recogidos por el propio interventor municipal en sus auditorías anuales».

No reparó en que el propio interventor puso de manifiesto que el «margen entre ingresos corrientes y gastos corrientes es prácticamente nulo, situación que como se viene advirtiendo por esta Intervención General ahoga la situación financiera a la hora de poder acometer nuevos gastos que necesiten una financiación distinta a la proveniente de subvenciones de otros entes». Además, incidió en que «los ratios de tesorería y financieros son negativos. Este signo guarda estrecha relación con la ausencia de ahorro neto, así como con la ausencia de remanente de tesorería». Pero estas apreciaciones no parecen importar a Maroto, que ayer volvió a defender una bajada de impuestos.