GARA
CALAIS
EL DRAMA DE LA INMIGRACIÓN EN EUROPA

El Eurotúnel, otro cepo mortal en la trágica ruta hacia la supervivencia

Un migrante sudanés murió en un intento desesperado de llegar desde Francia a Gran Bretaña por el túnel bajo el Canal de la Mancha. Con él ya son nueve las personas que fallecen cerca de las instalaciones del Eurotúnel en Calais desde principios de junio. París anunció el envío de agentes adicionales y Londres la instalación de una nueva valla.

Un ciudadano sudanés de entre 25 y 30 años falleció en la noche del martes al ser golpeado por un camión al tratar de entrar en la terminal de la empresa Eurotunnel en Calais, al norte del Estado francés. Se trata del noveno migrante que pierde la vida tratando de cruzar el Canal de la Mancha hacia Gran Bretaña.

Cerca de 3.000 migrantes, principalmente eritreos, etíopes, sudaneses y afganos, están acampados en las inmediaciones de Calais –el punto de paso hacia Gran Bretaña más cercano desde el continente– a la espera de una oportunidad para entrar en el túnel y llegar a territorio británico. En la noche del lunes al martes, unos 2.000 inmigrantes trataron de acceder a las instalaciones. Según la empresa gestora Eurotunnel, fue «el intento más importante desde hace un mes y medio».

Horas después de este fallecimiento, un adolescente egipcio sufrió una descarga eléctrica cuando pretendía subirse a un tren que comunica París con Londres. Un portavoz policial de la Gare du Nord parisina, desde donde parte el Eurostar, confirmó que se encontraba «muy grave». Según los primeros indicios, el joven, nacido en 1998, resultó electrocutado por una catenaria al tratar de saltar del techo de un tren Eurostar a otro regional. La compañía se limitó a informar de la interrupción de los servicios ferroviarios por el accidente de una persona.

El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, anunció el despliegue de 120 agentes suplementarios en Calais y acusó a Eurotunnel de no hacer lo suficiente para garantizar la seguridad de sus instalaciones.

En declaraciones a la emisora France Info, su presidente, Jacques Gounon, alegó que la empresa afronta una situación de «invasión sistemática, masiva y posiblemente organizada» y que precisa que el Estado francés despliegue «agentes suplementarios». Reclamó a los gobiernos de París y Londres una indemnización de 9,7 millones de euros por los gastos en reforzar las medidas de seguridad. «Desde la aparición de clandestinos en la zona de Calais, Eurotunnel ha invertido masivamente en medios físicos –vallas, iluminación, cámaras, barreras infrarrojas– y en humanos de protección de la terminal. Los efectivos de vigilancia se han duplicado para llegar a 200 personas, entre ellas unidades caninas», dijo en un comunicado.

Estas obras realizadas a principios de verano en el puerto prácticamente han imposibilitado a los migrantes acceder a los camiones que se embarcan en los ferris hacia Inglaterra. Por esta razón, se han trasladado a los alrededores de la terminal del Eurotúnel, un espacio de 650 hectáreas y 28 kilómetros de vallas.

Desde Singapur, el primer ministro británico, David Cameron, calificó de «muy preocupante» la situación y expresó su solidaridad «con los veraneantes que encuentran difícil el acceso a Calais por los disturbios» y prometió «hacer todo lo posible para trabajar con Francia a fin de acabar con todo esto».

«No tiene sentido buscar culpables. Se trata de trabajar con los franceses, de poner en marcha las medidas de seguridad adicionales, invertir más donde se necesite», declaró.

El lunes, la ministra británica del Interior, Theresa May, anunció que Londres invertirá 7 millones de libras (casi 10 millones de euros) en la colocación de una valla de seguridad de 1,9 kilómetros en la terminal del Eurotúnel en Coquelles, en los alrededores de Calais.

Se espera que esta valla, que se usó en la cumbre de la OTAN celebrada el pasado setiembre en Gales, esté operativa a finales de mes, junto con una zona de protección para los camiones en dirección a Inglaterra.

May, quien ayer presidió una reunión del comité Cobra de emergencia del Gobierno británico, abogó por reforzar la vigilancia en cooperación con París.

«Estamos trabajando codo con codo con las autoridades francesas y con el Eurotunnel para intentar incrementar la seguridad en Calais», manifestó.

«Muchos inmigrantes ya han llegado a nuestro país. Analizaremos las peticiones de asilo a su debido tiempo. Sin embargo, lo que es importante ahora es mejorar la seguridad en Coquelles para asegurarnos de que la gente deje de intentar entrar en el túnel. Eso significa trabajar con los gobiernos y con el Eurotunnel, que debe poner en marcha las medidas pertinentes para proteger sus trenes», resaltó la ministra británica.

Miles de migrantes esperan en Calais dar el salto a Gran Bretaña

Miles de inmigrantes viven hacinados en Calais, en el norte del Estado francés, solo para dar el peligroso salto a Gran Bretaña, atraídos por la lengua o las mayores probabilidades de encontrar trabajo.

«Lo británico significa libertad. Tenía una tienda de ordenadores en Siria y quiero hacer lo mismo en Gran Bretaña», dice a AFP Bilal, un sirio de 29 años que lleva 17 días en Calais tratando «cada noche» de atravesar el túnel bajo el Canal de la Mancha.

Aunque Gran Bretaña no es el primer receptor europeo de demandas de asilo (recibió 31.000 en 2014, una sexta parte que Alemania, primer país del mundo en solicitudes, según Eurostat), su economía se ha convertido en un imán. Se espera que su crecimiento sea de 2,6% este año, por 1,2% en el Estado francés, y su desempleo es la mitad del de su vecino del sur (5,6% versus 10%). Además, parece más proclive a aprobar las demandas de asilo. En 2014 dio el visto bueno al 39%, por un 22% en Francia.

La lengua también tiene un gran peso. Los principales países de origen de los demandantes –Eritrea, Pakistán y Siria– suelen tener gran dominio del inglés. Además, muchos de ellos «tienen redes familiares en Gran Bretaña», señaló Hugo Tristram, responsable para los refugiados de la Cruz Roja británica.

«Mi esposa y mis dos niños viven allí. Quiero regresar y vivir en un país pacífico», manifestó Adan, un sudanés de 38 años.

El drama de quienes, a diario, huyen de la guerra y la pobreza también se ha visto reflejado con intensidad en las costas italianas, a donde en las últimas 24 horas llegaron más de 1.400 inmigrantes y los cuerpos de catorce fallecidos. Al puerto de Reggio Calabria, en el sur del país, llegó ayer la nave Bourbon Argos con 692 inmigrantes procedentes de Eritrea, entre ellos 59 menores y 12 mujeres embarazadas.

Al puerto de Messina, en la isla de Sicilia (sur), llegaron 453 inmigrantes y los cuerpos de los 14 fallecidos que rescató el pasado lunes cerca de Libia la nave militar irlandesa L.E.Niamh, que forma parte del dispositivo comunitario Tritón, y la Dignity I de Médicos Sin Fronteras (MSF).

El tercer desembarco fue en la isla de Lampedusa, que recibió 279 inmigrantes rescatados en aguas cercanas a Libia.GARA

Cronología

30 octubre 2009

El cuerpo de un inmigrante indio de 25 años fue descubierto en un control en Calais dentro de un camión de matrícula eslovena. Pretendía embarcar junto a otros dos migrantes en un ferri dirección a Gran Bretaña.

13 agosto 2012

El cuerpo de una joven de origen asiático es encontrado debajo de un acantilado en una playa próxima a Boulogne-sur-mer. Según la Fiscalía, se trataría de una inmigrante víctima de una caída cuando intentaba cruzar el Canal de la Mancha a nado.

5 mayo 2014

Un joven eritreo muere al saltar de un camión en marcha porque éste circulaba en dirección contraria. Otros dos migrantes mueren ahogados al tirarse al puerto de Calais cuando intentaban acceder a la terminal del ferri.

23 mayo 2014

Un sudanés de 18 años fallece aplastado por un coche bajo el que se había enganchado para llegar a Inglaterra.

26 junio 2015

Un etíope muere en las cercanías del túnel al intentar montar en un vagón con la esperanza de llegar a la costa británica.

julio 2015

El día 20, tres migrantes mueren quemados al ser electrocutados cuando intentaban entrar en el túnel. Días antes, otro más murió dentro del Eurotúnel. Otro más falleció ahogado en Calais y otro fue atropellado.